Un total de 76 equipos de toda España, e incluso una representación de París, participarán este fin de semana en Zaragoza en la decimoquinta edición de los Juegos del Cierzo, una competición deportiva destinada a la integración en el deporte del colectivo LGTB+ y que ofrecerá en la capital aragonesa más de 220 partidos de voleibol, fútbol sala y vóley playa.

La vicealcaldesa del Ayuntamiento de Zaragoza, Sara Fernández, acompañada por las concejalas de Igualdad y de Deporte, María Antoñanzas y Cristina García, respectivamente, han presentado este jueves este evento deportivo abierto a todo el mundo con una visión inclusiva, según ha explicado el consistorio en una nota de prensa.

Organizada por la Asociación Deportiva Cierzo proLGTB+, en colaboración con el ayuntamiento, esta decimoquinta edición de los juegos se celebrará los días 29, 30 y 31 de abril y 1 de mayo en varios emplazamientos de la ciudad y supondrá el regreso de la cita tras dos años de parón a causa de la pandemia.

El cartel.

El cartel. SERVICIO ESPECIAL

De esta forma, 76 equipos procedentes de Madrid, Barcelona, Valencia, Torremolinos y París competirán en la capital aragonesa desde este viernes y hasta el lunes en las modalidades deportivas de voleibol, fútbol sala y voley playa. Durante la competición se disputarán 220 partidos, en los que participarán 398 personas, con un programa que comenzará este viernes con voley playa en el Parque Deportivo Ebro, donde un total de 24 parejas se enfrentarán en esta modalidad en categoría mixta.

Este sábado se disputarán tres competiciones de voley mixto, voley femenino y fútbol sala, de forma que de esta última, cuatro equipos y 32 jugadoras en total se medirán en el pabellón Ramiro Solans. En lo que respecta a la modalidad de voley mixto, un total de 41 equipos en cuatro niveles jugarán en el Parque Deportivo Ebro y los pabellones siglo XXI y Ciudad de Zaragoza, mientras que siete equipos de voley femenino compuestos por 52 jugadoras competirán en el Ciudad de Zaragoza.

Además de los partidos, está previsto realizar otras actividades, como visitas turísticas, una cena y una fiesta para los participantes, colaboradores, simpatizantes o todas aquellas personas que quieran conocer la asociación. Para inscribirse en la competición, no ha sido necesario tener un nivel profesional ni, por supuesto, una “orientación sexual” determinada, ya que el objetivo es lograr una alta participación para contribuir a la visibilización del colectivo mediante el deporte, un mundo que en ocasiones se convierte en un territorio hostil ya que con frecuencia se vierten “cánticos o insultos” homófobos en los partidos, ha explicado Antoñanzas.