En un momento en el que los precios no dejan de subir, una de las mejores formas para ahorrar en la factura de la luz es la generación distribuida, a través de la instalación de placas solares. En este cambio de modelo de uno de consumo energético basado en el uso de combustibles fósiles por otro en el que la energía limpia se genera a través de pequeños y medianos productores, que también son consumidores, juegan un papel destacado.

En España se ha ido expandiendo este cambio de paradigma. En 2021 se instalaron en el país 1.203 MWn de instalaciones fotovoltaicas, según los datos de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), principal asociación del sector. Un verdadero boom, ya que el crecimiento respecto a 2020 ha sido de más del 100%.

Con Holaluz, si instalas placas solares en alguna de tus viviendas, pueden compensar el coste de luz en otra Servicio Especial

No obstante, siempre que se habla de autoconsumo de energía eléctrica se hace mirando a los domicilios habituales. ¿Qué ocurre en las segundas residencias?, ¿qué beneficios podemos obtener?, ¿resulta rentable instalar placas solares en estas viviendas?... En este artículo podrás descubrir las claves.

Ventajas de instalar paneles solares en una segunda residencia

En muchas ocasiones, el consumo eléctrico de una segunda residencia no se tiene en cuenta ya que se cree que es mínimo. Sin embargo, instalar placas solares en una segunda residencia ofrece beneficios. ¿Por qué hacerlo?

  1. Más potencia. En las segundas residencias se contrata normalmente una potencia menor. En muchas ocasiones, cuando enchufamos demasiadas cosas, los automáticos saltan. Con una instalación de autoconsumo se añade a la potencia contratada la que generan los paneles solares. Permite mantener el precio y, al mismo tiempo, tener la potencia que necesitemos.
  2. Ahorro en la factura de la luz. Los usuarios que deciden instalarse paneles solares en una media consiguen ahorrar de media entre el 40 y el 60% de la factura anual de la luz.
  3. Beneficios fiscales. Muchos municipios ofrecen una rebaja del IBI por tener una instalación fotovoltaica de energía eléctrica. También y gracias a las ayudas de los Next Generation se puede subvencionar la instalación y lograr hasta un 60% de deducción sobre el IRPF.
  4. Sube el valor de la segunda residencia. A la hora de adquirir un inmueble cuenta cada vez más la eficiencia energética. Por ello, una vivienda con una instalación fotovoltaica puede ver incrementado su precio. Es una inversión que supone a un ahorro a largo plazo.
  5. Poco mantenimiento. La vida útil de las placas solares es de entre 25 y 30 años. El único tipo de mantenimiento que requieren con más frecuencia es una limpieza 3 o 4 veces al año. A ello hay que sumar la posibilidad de vender los excedentes y también ahorrar en la factura de la luz del domicilio habitual, ya que compañías como Holaluz permiten compensarla con el excedente generado en cualquier vivienda del usuario.

Una instalación fotovoltaica permite ahorrar entre el 40 y 60% del coste energético anual. Servicio Especial

¿Cómo se compensan los excedentes generados por las placas solares?

En España, el autoconsumo colectivo se reguló con el Real Decreto 244/2019. Con la actual legislación se contemplan tres modalidades con diferentes formas de compensar los excedentes que generan las instalaciones fotovoltaicas colectivas.

Con el modelo de Autoconsumo colectivo sin+ excedentes se instala un dispositivo antivertido para evitar que la energía sobrante se vaya a la red de transporte y distribución. Respecto a las dos modalidades con excedentes, existen dos fórmulas.

  1. Autoconsumo colectivo con excedentes acogidos a compensación. A través de la comercializadora contratada, los excedentes se inyectan a la red y los titulares de la instalación fotovoltaica reciben una compensación en su factura de la luz.
  2. Autoconsumo colectivo con excedentes no acogidos a compensación. Los titulares de la instalación fotovoltaica venden los excedentes al mercado eléctrico como productores.

Aprovechar todo el potencial de tu tejado con la generación distribuida

España cuenta con 2.500 horas de sol anuales. Una fuente de energía inagotable y limpia con la que la transición energética puede convertirse en una realidad, y los tejados son la clave de todo. Con esa filosofía nació La Revolución de los Tejados, un movimiento iniciado hace dos años por Holaluz con el objetivo de transformar cada metro cuadrado de tejado en energía 100% renovable.

Con 10 millones de tejados transformados se podrá pasar de un 40% de energía renovable actual al 80%. Un dato que refleja muy bien lo que se puede lograr. Este cambio reducirá las emisiones de CO₂ en un 60% y acercará más a España a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas para 2030.

Holaluz instala tantas placas solares como permita tu tejado y propone un modelo de generación distribuida con el que las personas son al mismo tiempo productoras, vendedoras y consumidoras de energía. Se trata de un sistema disruptivo que democratiza la gestión de la energía, desarrolla un modelo apoyado en las fuentes de energía renovables y reduce los precios mediante la producción de energía de kilómetro cero que también garantiza la independencia energética del sistema.

Ahora puedes compensar el consumo de tu domicilio habitual instalando placas solares en una segunda residencia. Y viceversa.

Holaluz  ofrece una cuota de ahorro fijo garantizada del 70% en sus contratos que puede llegar al 100%. La compañía paga los excedentes generados por las instalaciones fotovoltaicas a 0,10 € el kWh. Un precio por encima del mercado y en el caso de sobrar ahorro los clientes pueden cobrarlo en uno o dos pagos de 300 €.

Pero Holaluz va más allá. También la compañía ofrece la posibilidad de reducir la factura de la luz de un domicilio con el ahorro generado por la instalación fotovoltaica de otra propiedad. Si por ejemplo cuentas con una segunda residencia donde puedes instalar placas solares y no en tu domicilio, puedes compensar con ese ahorro la factura del segundo. Este mecanismo también funciona a la inversa. En definitiva, puedes dejar la factura de un domicilio a cero y reducir el total de las facturas de otras propiedades.