¿Y SI OTRA VEZ ARRASA EL PP?

En Aragón la encuesta del CIS cayó como una bomba. En todos los partidos (salvo el PP, claro) y organizaciones sociales anti-trasvase, la posibilidad de que los conservadores repitan victoria, arrasen como hace cuatro años y se lleven ocho diputados, por cuatro el PSOE y uno CHA, dejó al personal estupefacto y a los de Rudi más contentos que unas castañuelas. Lo cierto es que incluso observadores bastante neutrales consideraban muy difícil que el factor trasvase pesara tan poco en los electores que apenas alterase la correlación de fuerzas. Pero la duda aún corroía a más de uno. ¿Qué hacemos si el PP se lo lleva de calle?, preguntábanse acongojados. Pues aguantarse. ¿Qué, si no?Cuando la campaña inicia su segunda y última mitad, los compromisos de los candidatos aragoneses ofrecen un abigarrado pero previsible catálogo recogido en páginas posteriores. A ello hay que añadir la "guerra del agua". Ayer, Atarés y Membrado, por separado pero centrados en el mismo tema, cruzaron acusaciones y reproches en relación con la política educativa, su legislación y su financiación. Lo de siempre.