Guerra en Oriente Próximo

Israel despliega a 300.000 soldados mientras la guerra con Hamás supera los 2.000 muertos

Las cifras de muertos no tienen precedentes, sobre todo en Israel, donde más de 1.200 personas han caído víctimas de la ofensiva de la milicia islamista

Milirares israelíes en Kfar Aza, cerca de la frontera con Gaza.

Milirares israelíes en Kfar Aza, cerca de la frontera con Gaza. / EFE

Andrea López-Tomàs

La desolación y la rabia se extienden por Gaza e Israel. El conflicto abierto tras el ataque sorpresa de Hamás del sábado ya suma más de 2.000 muertos entre ambos bandos, y el Ejército israelí mueve a una cifra récord de reservistas –300.000– para iniciar la invasión terrestre. Como ha anunciado su ministro de Defensa, Yoav Gallant, Israel avanza hacia una "ofensiva completa" en Gaza. "Hamás quería un cambio en Gaza, y va a cambiar 180 grados respecto a lo que pensaba, van a arrepentirse de este momento; Gaza nunca volverá a ser lo que era", ha dicho a sus soldados. Las cifras de muertos no tienen precedentes, sobre todo en Israel, donde más de 1.200 personas han caído víctimas de la ofensiva de la milicia islamista.

En Gaza, ya son 950 los muertos bajo los bombardeos continuos israelís. Miles de heridos luchan por sobrevivir en ambos bandos, aunque en condiciones distintas. Tras el corte de suministros israelís de electricidad y combustible al enclave el lunes, la única central eléctrica de la Franja de Gaza y el único proveedor actual de electricidad se quedarán sin combustible en 10 horas a 12 horas, ha anunciado esta mañana el presidente de la Autoridad Palestina de Energía, Thafer Melhem.

Armar a la población

Israel sigue intensificando la dureza de los bombardeos que han arrasado con centenares de edificios residenciales y han acabado con la vida de dirigentes de Hamás. Más de 22.600 unidades residenciales han sido destrozadas junto a 10 centros de salud y 48 escuelas que han quedado dañadas. Al Ejército israelí no le importa que las milicias de la Franja tengan en sus manos al menos a 130 israelís, capturados en la operación. Hamás, a su vez, ha continuado con el lanzamiento de cohetes sobre las localidades fronterizas con Gaza.

Además, el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, ha dado por iniciada la 'Operación Guardián de los Muros 2'. "Cada residente de Sderot [una de las localidades más afectadas por las incursiones de Hamás] podrá portar un arma", ha declarado. Este martes el polémico político ultraderechista anunció la distribución de 10.000 armas de fuego para la seguridad de civiles en zonas fronterizas. Además, los rifles, cascos y chalecos antibalas también llegarán a equipos de seguridad civiles en ciudades cerca de las fronteras y asentamientos en Cisjordania.

Ataques desde el Líbano y Siria

A este armamento de la población civil, se le suma la convocatoria de reservistas más masiva de la historia. Lejos de la división que dominaba al país hace unas semanas por la reforma judicial del gobierno de Binyamín Netanyahu, más de 300.000 reservistas han respondido a la llamada a filas y han sido repartidos por todo el territorio. En la frontera con Gaza, ya hay unos 100.000 preparados para entrar con todo en el territorio palestino a través de la temida ofensiva terrestre. "Mañana me voy a Gaza, espero poder entrar y devolverles lo que nos han hecho", declaraba un joven de Jerusalén este martes. "Solo hay un lado bueno del relato", defiende. Fuentes militares aseguran que la ofensiva terrestre podría llegar en las próximas 48 horas, pero aún no hay confirmación oficial.

También, en la frontera norte, se han concentrado miles de reservistas para defender a Israel en caso de que la milicia libanesa Hizbulá quiera atacarlos. Durante el martes, se registraron el lanzamiento de cohetes desde el Líbano por parte de este grupo chií y desde Siria por parte de una milicia palestina. En la mañana del miércoles, las posiciones israelís han recibido el ataque de misiles antitanques cerca de la frontera libanesa, donde se ha pedido a los residentes que se mantengan en los refugios.