Es el importe que se pagó a la ingeniería Idom y a Cerouno Arquitectos por el estudio realizado sobre las alternativas de emplazamiento para Expo 2014 y del esquema director con el que se fijó un calendario de contrataciones que hicieran viable la ubicación del recinto en Vadorrey y Las Fuentes. Ahora queda en papel mojado muchas de las exigencias que marcaba aquel estudio para este año 2010 y es una de las consecuencias más lamentables de la imposibilidad de alcanzar acuerdos políticos en el ayuntamiento, que esa inversión ahora resulta estéril.