Un matrimonio aceptó ayer sendas penas de tres años de prisión por narcotráfico, tras el acuerdo al que llegaron sus abogados --José Palacín y Soraya Laborda-- con la Fiscalía y los magistrados de la Sección Sexta de la Audiencia de Zaragoza. Otros tres imputados, miembros de la misma familia y defendidos por Palacín y Ana María Gil, resultaron exonerados en el trato.

La familia fue arrestada en la operación Vespino, en mayo del año pasado, tras investigar la Policía la venta de droga desde un domicilio del barrio de Torrero. Según consideraron los investigadores, que se incautaron de siete kilos de hachís y 200 gramos de cocaína, la familia, de origen suramericano, planificaba las operaciones en una peluquería y los cabecillas, ahora condenados, se encargaban de la venta en el domicilio y de la atención a los clientes más importantes de la organización.