El Ayuntamiento de Jaca aprobó ayer, en pleno extraordinario, la ubicación laboral definitiva que tendrán los antiguos trabajadores del matadero municipal. Por mayoría absoluta, con la abstención de CHA, salió adelante un plan de empleo, que supone el último capítulo del polémico cierre del matadero.
A partir del próximo año los seis trabajadores que antes de mayo estaban en las dependencias del matadero quedarán repartidos. "El encargado va a ser el guardia del canal de abastecimiento, ya que esta plaza que estaba vacante; dos se van a incorporar el servicio municipal de obras y los tres que restan van a inaugurar un nuevo servicio, denominado Brigada de Mantenimiento de Mobiliario Urbano", explicó el concejal de Régimen Interior, Juan David Vila, quien aseguró que todos mantendrán las mismas retribuciones que tenían en el matadero.
Sobre el nuevo servicio, Vila dijo que era "una pretensión del ayuntamiento y que cuenta con el respaldo de los sindicatos". Las tareas de la nueva brigada irán desde la colocación de graderíos y sillas en eventos de la ciudad hasta el arreglo de bancos, señales y resto de mobiliario urbano. Vila destacó que "éstas eran tareas hacía la brigada de obras, por lo que ahora, estará más liberada".
