Aragón ha registrado 309 casos de malaria en los últimos diez años, todos importados excepto el que se produjo en Sariñena en 2010, una enfermedad erradicada en España pero que, al igual que otras transmisibles por insectos, puede volver a aparecer por el cambio climático y el movimiento global de personas.

Se trata de "pequeñas picaduras", las de los insectos, que pueden provocar "grandes amenazas" como dice el lema del Día Mundial de la Salud, que se celebra hoy, y que son más frecuentes en zonas tropicales y en aquellas con problemas de agua potable y saneamiento, ha dicho hoy el director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Sancho.

En Aragón, ha afirmado Sancho en rueda de prensa, la situación epidemiológica en cuanto a las enfermedades transmisibles por picaduras de insectos es "satisfactoria", no se ha dado ningún contagio directo y todos los casos han sido importados, por inmigrantes o personas que han ido al extranjero, excepto el de malaria de Sariñena,en 2010.

"Hay sistemas bastante garantistas para, en caso de que aparezca una enfermedad de este tipo, luchar contra ella", ha asegurado el director general, como ocurrió en el caso de Sariñena.

De estas enfermedades, la malaria o paludismo es la más mortífera, con casi un millón de muertes anuales, y el dengue la que tiene mayor crecimiento, ya que casi se ha duplicado su prevalencia en los últimos cincuenta años, ha agregado Sancho en una rueda de prensa.

Sin embargo, el director general ha subrayado que se asiste a un "nuevo escenario" fruto del cambio climático, con el correspondiente aumento de las temperaturas que favorece la proliferación de los insectos transmisores, y el movimiento global de personas o mercancías, que pueden llevar de un lugar a otro la enfermedad.

En Aragón, en los últimos diez años se han registrado 309 casos de malaria, todos importados, excepto el ocurrido en 2010 en Sariñena (Huesca), una patología que en España era endémica hasta 1967 y sobre todo de zonas húmedas, como pueden ser el Delta del Ebro o las marismas del Guadalquivir.

También se han contabilizado 16 casos de dengue, todos ellos importados, y 61 de leishmaniasis y 15 de fiebre exantemática mediterránea.

En 2013, ha informado Sancho, los centros de información para viajes internacional de las tres provincias aragonesas tuvieron 8.458 consultas, de ellas 6.707 en el de Zaragoza, 1.352 en el Huesca y 300 en el de Teruel.

Mientras que el teléfono de información para estas cuestiones ha recibido 2.986 llamadas, de las que 2.671 fueron realizadas en Zaragoza, 191 en Huesca y 124 en Teruel.

En cuanto a las consultas y llamadas telefónicas, el 43 por ciento estuvieron relacionadas con el turismo, el 18,1 por ciento con la inmigración y el resto, a partes iguales, por motivos de trabajo o familiares.

Según el veterinario Juan Antonio Castillo, catedrático de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, existe el riesgo de que muchas enfermedades de este tipo aparezcan en lugares donde no existían, como en países desarrollados y con buenos sistemas sanitarios.

Ya que se están extendiendo cada vez más por los cambios en la climatología y por la globalización y el tránsito de personas y animales, ha agregado Castillo, quien trabaja desde hace más de treinta años en enfermedades transmitidas por vectores, es decir, el organismo que lleva el patógeno al hombre.

Aunque el sistema sanitario controla "bastante bien" estas enfermedades según Castillo "no hay que bajar la guardia" y no se debe pensar que se dan sólo en países pobres.

En este sentido, el veterinario Javier Lucientes, profesor en el Departamento de Patología Animal de la Facultad Veterinaria de la Universidad Zaragoza, ha incidido en que hasta ahora sólo se veían casos importados, pero hay algunas patologías que van tomando presencia, como la malaria o el dengue.

Sobre el caso de Sariñena de una malaria autóctona, ya que la mujer no había viajado al extranjero, Lucientes ha explicado que se actuó con "rapidez y agilidad", al contrario que en Grecia, dónde se dieron tres casos al mismo tiempo y ya van por más de trescientos.

Otros mosquitos como el tigre o el egipcio también están causando problemas en Europa y el primero de ellos se encuentra en expansión en la costa española, pero todavía no ha llegado a Aragón.