Cada 2 de febrero, día de la Candelaria, Barbastro se transforma en un ir y venir de gentes que, desde hace siglos, se citaban en la capital del Somontano para cumplir con la tradición, descubrir los puestos de los comerciantes en las calles del centro y asistir al emotivo reparto y bendición de candelas y caretas. Este año, la pandemia del coronavirus impide que la Feria de la Candelera se celebre con todo su esplendor. No habrá puestos en la calle ni aglomeraciones. Pero el Ayuntamiento de Barbastro y los comerciantes de la ciudad han tirado de ingenio para celebrar la efeméride del privilegio otorgado a la ciudad del Vero para poder celebrar esta feria por la reina Germana de Foix, segunda esposa de Fernando El Católico, en el año 1512.

El consistorio mantiene actos tradicionales como la bendición de candelas en la Catedral de Barbastro y ha preparado otras actividades que, con las debidas medidas de seguridad y control de aforos, permitan el doble objetivo de «reivindicar el hecho histórico que dio origen a la feria, así como apoyar y dinamizar el comercio y la hostelería local». No en vano, con miles de visitantes que llegan a Barbastro en un solo día, la Feria de la Candelera es uno de los momentos más importantes del año para el sector.

Tras la bendición de candelas, que tendrá lugar en el altar mayor de la Catedral de Barbastro a las 10.30 horas --él único acto que queda intacto tras el covid-19--, en las plazas del Mercado y de la Candelera tendrán lugar, con aforos reducidos y acceso controlado, recreaciones históricas que conmemorarán la concesión del privilegio. En la plaza de la Candelera se localizará el campamento de tropas de Fernando El Católico, mientras que la corte de Germana de Foix se ubicará en la plaza del Mercado en la que, a las 12 del mediodía tendrá lugar la lectura del bando fundacional de la Feria de la Candelera.

El tradicional reparto de caretas y candelas, que habitualmente dejaba filas interminables en la plaza del Mercado, se traslada en esta ocasión a los establecimientos comerciales. Estos, a su vez, cobrarán un especial protagonismo ya desde este sábado, con ofertas y descuentos especiales de fin de temporada, «a precios de feria». Y los comerciantes culminarán este 2 de febrero su campaña de promoción navideña, con el sorteo de una moto entre sus clientes.

Además, por el momento trece establecimientos hosteleros se han sumado a la celebración con la propuesta culinaria Plato de cuchara en la Candelera, que podrá degustarse en los restaurantes o pedir para llevar.

«La Candelera es la feria más antigua de Aragón y este año se va a celebrar en unas circunstancias excepcionales, ya que no se va a poder contar con puestos de venta en la calle, pero se ha querido mantener la edición con una serie de actos de reivindicación del hecho histórico, cumpliendo con toda la normativa sanitaria», destacó la concejal de Desarrollo, Belinda Pallás.

Pallás presentó una de las novedades, la edición de caretas con la imagen de Germana de Foix y de un juglar, en cuyo reverso figura la historia de la Candelera y de la segunda esposa de Fernando el Católico, que los más pequeños podrán pintar y recortar.

Fernando Torres, alcalde de Barbastro, mostró su esperanza en que «poco a poco podamos ir retomando la normalidad» y su deseo de que «el próximo año 2022 podamos celebrar la Feria de la Candelera como estamos acostumbrados».

El colofón a la jornada lo pondrá, a las 19 horas la conferencia La Feria de la Candelera, 500 años de historia, a cargo del historiador local Juan José Nieto. La conferencia tendrá lugar en el auditorio del Centro de Congresos con aforo limitado.