El verano es siempre una época en la que se prodigan los reventones en las ciudades. Zaragoza no es una excepción, aunque este año parecía que este tipo de incidencias no estaban produciendo los problemas de otros años con la caída del consumo que, habitualmente, acaba afectando a la presión del agua y pone a prueba la resistencia de las tuberías. Sin embargo, ayer se concentraron varias a la vez y hasta en cuatro ocasiones se registraron reventones, en sitios muy distintos de Zaragoza y con afecciones desiguales.

El de peores consecuencias se registró en Torrero. En torno a las 14.00 horas, una tubería de fibrocemento de 250 milímetros de diámetro sufría una rotura que obligaba a cerrar al tráfico la avenida América y desviar a los conductores por el tercer cinturón desde la confluencia con la Ronda Hispanidad, incluidas las seis líneas de autobús urbano que circulan por este vial principal del distrito. La incidencia se produjo a la altura del número 42, pero acabó afectando a todo el tramo desde la calle Andrés de Uztarroz hasta la plaza de las Canteras. Se desplazaron al lugar las brigadas municipales, que estuvieron trabajando durante horas en la reparación. Al final de la tarde se conseguía abrir un carril de circulación para recuperar el tránsito de vehículos por esta arteria principal.

EN LA CARRETERA DE LOGROÑO

Algo similar sucedió por la mañana en la céntrica calle Doctor Cerrada, a la altura del número 20, donde una tubería de fundición gris de 200 milímetros sufrió una rotura que dejó sin agua a sus vecinos y a los de los portales 14, 16 y 18, así como a un bloque de la calle Almagro y a la Biblioteca de Aragón. Durante horas estuvieron trabajando las brigadas en reparar la afección, el mismo tiempo que quedó cortada al tráfico la calle, que pasado el mediodía se pudo reabrir.

Horas antes, de madrugada, se produjeron dos roturas simultáneas en una tubería de 150 milímetros de la calle Menéndez Pelayo, una detrás del instituto Corona de Aragón y otra a la altura del numero 24 . Dejó sin agua a siete comunidades de vecinos y hasta la tarde no se pudo restablecer completamente el servicio. También por la noche se había producido otra en la Calle E del polígono Malpica (tubería de 150 milímetros), aunque a mediodía se recuperó el suministro.

En paralelo, ayer también se recuperó el abastecimiento en la tubería de fundición dúctil de 600 milímetros presente en todo el corredor de la carretera de Logroño, que se había interrumpido el martes pasado por las obras del futuro outlet de Pikolin.