Las catas realizadas para averiguar las causas del derrumbamiento del paso a nivel han dado como resultado el descubrimiento de vías de agua en el barranco situado al otro lado del río. De esta forma, y según indicaron fuentes de la DGA, el paso a nivel se encontraría situada entre dos aguas. Por un lado, las del río Ebro, y por el otro las vías de agua --algunas de las cuales han quedado ahora a la vista-- procedentes de regadíos y manantiales. La acumulación de agua durante años en la zona ha podido ser una de las causas del hundimiento.

Ante este problema, el lunes comenzó a trabajarse entre las tres primeras pilonas del paso a nivel más cercanas al puente del Ebro para abrir drenajes con el objetivo de que el agua pueda discurrir hasta el Ebro. Mientras tanto, continúan los trabajos para obtener la mayor información posible tanto del subsuelo como del propio cauce del río. Según explicaron las mismas fuentes, en las pruebas realizadas durante los últimos días se han encontrado algunas muestras de yesos que han perdido su consistencia a causa de la penetración del agua.