La población de osos en el Pirineo está a punto de experimentar un fuerte aumento, según han informado varias entidades francesas a favor de la introducción del plantígrado que están haciendo un seguimiento de los ejemplares que viven en la cordillera. Cinco osas adultas, por los datos que obran en su poder, están a punto de tener camada y lo más habitual es que esta sea de dos oseznos, si bien en ocasiones y según la especie pueden llegar a cuatro. Este dato mueve al optimismo a los grupos que apoyan la política de reintroducción de este animal que había desaparecido por completo de los Pirineos y que empieza a recuperarse gracias a la suelta de ejemplares traídos de países del Este de Europa. Sin embargo, las asociaciones ganaderas de un lado y otro de la cordillera han mostrado su temor a que la multiplicación de los plantígrados suponga incrementar las pérdidas económicas que se atribuyen a los osos, en particular por el ataque a rebaños. Los partidarios de la reintroducción opinan, por el contrario, que las indemnizaciones que el Estado francés abona a los ganaderos son demasiado elevadas, hasta el punto de que creen que existe una tendencia generalizada a atribuir a los osos las pérdidas de ovejas que pueden tener otro origen, como el ataque de perros asilvestrados. En Aragón, la noticia de las camadas en preparación ha causado asimismo gran preocupación.