La coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos ha registrado en la sede de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) más de 100.000 firmas recogidas contra el proyecto de construcción del pantano en esta población oscense, que fue anulado este mismo mes por la Audiencia Nacional y que confían en que se descarte definitivamente.
La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional considera en dos sentencias que el citado embalse, en el Gállego, afectaría "significativamente la ecología del río" y no cuenta con los estudios medioambientales y de interés público pertinentes.
Con estas dos sentencias, recurribles ante el Tribunal Supremo, la Audiencia estima los recursos contra el embalse de tres municipios afectados (Biscarrués, Murillo de Gállego y Santa Eulalia de Gállego) y cinco asociaciones ecologistas, que denunciaban una obra destinada a aumentar el regadío del Alto Aragón y que habría inundado parte de los tres términos municipales y anegaría el río Gállego.
Pese a que el fallo da la razón a los colectivos opositores a la construcción del embalse, la coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos ha entregado hoy en la CHE más de 100.000 firmas contra el proyecto dado que su intención es continuar en la lucha hasta el descarte "definitivo" de esta obra y la sentencia es recurrible ante el Tribunal Supremo.
Así lo ha recordado a los medios el concejal de Santa Eulalia de Gállego y representante de la coordinadora y de la Asociación de Amigos de la Galliguera, Fernando López Morfioli, quien ha mostrado su satisfacción por la decisión de la Audiencia y su confianza en que, en caso de recurso ante el Supremo por parte de colectivos favorables al embalse, como Riegos del Alto Aragón, no sea admitido dado que el contenido del fallo es "muy contundente".
Ha agradecido el apoyo de las personas y asociaciones que durante "treinta años de lucha" han mostrado su oposición a este proyecto y ha añadido que se han entregado casi 16.000 firmas recogidas de forma presencial y otras 85.000 recibidas a través de Internet.
El edil y miembro de la coordinadora ha destacado entre los motivos de oposición al embalse que se estropearía "la única parte que queda sin regular del Gállego, que pasaría a ser un depósito de agua y estaría totalmente regulado desde su nacimiento hasta aquí, en Zaragoza".
En la actualidad existen sólo 30 kilómetros en el Gállego sin regular, entre los pantanos de Ardisa y La Peña, ha añadido.
Y además de que existe una Zona de Especial Protección para las Aves (Zepa) y un Lugar de Interés Comunitario (Lic), se han creado en el territorio 200 puestos de trabajo directos relacionados con el turismo de aventura y aguas bravas y otros 500 indirectos vinculados al turismo rural, la hostelería y la restauración, ha concluido.
