Los casos Plaza afrontan una semana frenética. En solo tres días pasarán por los juzgados once imputados y tres testigos en tres de los asuntos, mientras en otro de ellos la instructora --la jueza Mercedes Terrer-- debe decidir si prosigue con las actuaciones del asunto de Caladero y ordena la práctica de varias diligencias o si las sobresee por entender que en ellas no hay indicios de delito.
El martes a las 9.30 de la mañana están citados a declarar en los juzgados de Instrucción números 5 y 12, respectivamente, Carlos Escó, exconsejero delegado de Plaza y exviceconsejero de Obras Públicas de la DGA, y Francho Chabier Mayayo, empleado de Acciona y principal testigo de cargo de la Fiscalía Anticorrupción durante la primera fase de las pesquisas sobre el saqueo de la empresa pública.
El primero comparecerá como imputado en el asunto de los pagarés de Codesport --el pago de un sobreprecio de 17 millones de euros en una contrata a una empresa de Agapito Iglesias-- y el segundo lo hará como testigo en la causa del apeadero ferroviario y la urbanización de la zona de reserva para futuros crecimientos de Plaza.
Esa misma mañana está citado como testigo en el primero de esos asuntos Pedro Colás, exdirector financiero de la empresa pública, y como perito el arquitecto que elaboró el estudio en el que la actual dirección de Plaza basó su denuncia.
El jueves 20 y el viernes 21 serán jornadas de tráfico intenso en el caso saqueo, en el que están citados a declarar cada día cinco imputados. El primer día lo harán cinco empresarios --entre ellos Agapito Iglesias-- sospechosos de pagar mordidas a la guardería de las hijas del exgerente de Plaza y encubrirlas mediante facturas falsas. El segundo, entre otros, declaran la esposa y una hija de Ricardo García Becerril.
