La comisión de delitos se ha reducido un 50% desde la activación del estado de alarma para combatir el coronavirus. Un buen dato si no fuera porque los delincuentes se las han ingeniado para sacar provecho de esta pandemia.

En Aragón todavía no se ha registrado ninguna estafa, pero desde las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado advierten que podrían llegar, especialmente, por vía telemática. De ahí que el director adjunto operativo de la Guardia Civil, Laurentino Ceña, señalara en la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de gestión técnica por el covid-19 que la Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil está trabajando en ello e incluso ha lanzado un correo electrónico de consultas: ciberestafas@guardiacivil.org.

Una de las empresas que trabaja en seguridad informática, Panda Security, ha identificado solo en una semana un pico de ataques de malware -software malicioso que trata de infectar un ordenador o un móvil- que dirigen a sus víctimas a webs infectadas utilizando el gancho informativo del coronavirus.

Atención coronavirus

Uno de ellos, según esta compañía, es un mensaje con el asunto «Atención coronavirus» que instala un malware a través de Microsoft Office para abrir lo que los informáticos llaman «puerta trasera» que es una vía por la que pueden acceder al ordenador.

Desde el lunes de la semana pasada han observado nuevos envíos masivos de emails que dirigen a una web de phishing en la que un virus informático llamado Remcos RAT está infectando los dispositivos de los usuarios. El ataque se lleva a cabo por medio de un supuesto archivo PDF denominado «Medidas de seguridad ante el Coronavirus». Sin embargo, al abrir el archivo se ejecuta el malware.

Pero no solo hay estafas virtuales, el Cuerpo Nacional de Policía alerta del fraude llevado a cabo por personas que se hacen pasar por supuestos técnicos de Sanidad que acuden a los domicilios a desinfectar y comprobar la situación del hogar.

Eligen víctimas principalmente mayores, les dicen que se queden en una habitación encerrados para evitar intoxicaciones con los productos que emplean y aprovechan para robar en sus casas.

Desde la Policía resaltan que Sanidad no ha enviado a ningún efectivo a realizar esta clase de trabajos, por lo que piden que, «no se abra la puerta a ningún supuesto médico ni enfermero ni técnico provisto con un equipo de protección (EPI) que se presencie en el domicilio si no se ha solicitado anteriormente este servicio de forma oficial».

Pero también se ha dado la modalidad de los que se hacen pasar por sanitarios y se proponen para hacer pruebas del coronavirus o les ofrecen geles desinfectantes, mascarillas, etc. En este sentido, Cruz Roja ha tenido que aclarar en sus redes sociales que «no acude a domicilios sin cita previa ni cobra in situ ningún servicio».

Versión religiosa

También está la versión religiosa, especialmente en el medio rural. Falsos sacerdotes llaman a las casas y ofrecen auxilio pastoral: distribuir la comunión o impartir el sacramento de la penitencia, aprovechando un momento de despiste de las víctimas y les roban. Varios arzobispados como el de Mérida-Badajoz ya lo han denunciado y han hecho saber «que los sacerdotes están disponibles para todo aquello que se les demande dentro de su ministerio, pero solamente concretando el momento y el lugar previamente».

La semana pasada fue detenido por la Policía un ciudadano chino en Madrid que había insertado un anuncio como suministrador de mascarillas quirúrgicas en internet. La víctima que denunció los hechos pretendía adquirir 22 cajas del material sanitario, pagó 600 euros y nunca le llegaron.