El Seprona de la Guardia Civil ha denunciado a a 17 cazadores por el incumplimiento de las limitaciones de movimiento de la comunidad autónoma y Zaragoza. Catorce de ellos fueron denunciados en un coto de caza de Sos del Rey Católico y otros tres en otro ubicado en Urrea de Jalón.

En la mañana del sábado 14 la Guardia Civil de Ejea de los Caballeros localizó una batida de caza mayor que se iba a llevar a cabo en una finca vallada de la localidad de Sos del Rey Católico.

Al objeto de verificar la documentación de la cacería y que se cumplían las medidas sanitarias adoptadas frente a la actual crisis sanitaria, apoyados por una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil de Sos del Rey Católico, procedieron a la identificación tanto de los cazadores como s asistentes, comprobando que 14 de ellos se habían desplazado desde la Comunidad Foral de Navarra.

Por estos hechos estas 14 personas fueron propuestas para sanción por el incumplimiento de las limitaciones de movilidad entre comunidades, decretadas por la normativa vigente para la contención de la

propagación de la covid-19.

Igualmente, en la tarde-noche de ese mismo día se localizó un vehículo, a la entrada de la localidad de Undués de Lerda, que transportaba 28 jabalíes abatidos en la cacería de Sos con destino a una empresa de Huesca para su comercialización, comprobando que no portaba la documentación pertinente que garantizaba la trazabilidad del producto y que los animales se encontraban eviscerados.

Igualmente verificaron que el vehículo no tenía en vigor el certificado que posibilita el transporte de mercancías perecederas y que garantiza la cadena de frío. Ante estos hechos se confeccionó la correspondiente acta denuncia para su remisión a la autoridad competente y se solicitó la presencia de los veterinarios del Servicio Provincial del Departamento de Sanidad de Zaragoza, que tras realizar la inspección determinaron que los animales no eran aptos para el consumo humano, decretando su destrucción.

Por otro lado, el domingo día 15, el Seprona identificó a varias personas en el exterior de una caseta de cazadores ubicada en un coto de caza de la localidad de Urrea de Jalón, comprobando que tres de estos se habían desplazado desde Zaragoza, con sus armas y perros, para realizar el deporte cinegético, motivo por el que fueron propuestos para sanción por el incumplimiento del confinamiento perimetral de la capital aragonesa.