La polémica por la celebración de la conferencia Por el derecho a decidir en el Centro Cívico Delicias de Zaragoza convocada para mañana (decisión judicial mediante) saltó anteayer con el anuncio del PP de un recurso para impedirla, pero en realidad fue solicitada el pasado sábado, 9 de septiembre. La inscripción la realizó una mujer a nombre de la asociación Mayores Indignados, dentro de las Mareas de la Dignidad, y en el formulario figuraba como charla-conferencia con los mayores como público objetivo.

Según fuentes municipales consultadas, la asociación es usuaria habitual del centro cívico para actividades relacionadas con el barrio, y el contenido que se anunció en los carteles de la convocatoria (intervenciones del colectivo anticapitalista Resisteix de Lérida y la periodista Marta Clar, de La Izquierda Diario) tampoco despertaron las suspicacias de nadie, hasta el recurso de los populares por el presunto conflicto constitucional. Donde unos ven apología de un referéndum ilegal, otros ven un intento de coartar la libertad de expresión e incluso el derecho de reunión. Y como parece el sino de ZeC, sus decisiones (o autorizaciones, en este caso) deberán someterse al arbitrio de un tribunal.

La reserva, según fuentes consultadas, fue como cualquier otra. Y es que la normativa municipal permite a cualquier persona y asociación solicitar espacio en los centros públicos, de forma gratuita, con determinadas salvedades. Entre ellas, que sean eventos que puedan alterar el orden o los soliciten asociaciones de las que se disponga de «información contrastada» sobre su naturaleza «sectaria», o cuyos actos puedan ser inconstitucionales. Si esto se comprueba a posteriori, ya sería denunciable, indicaron fuentes consultadas.

Los responsables consultados entienden que habría que interpretar torticeramente el contenido de la charla-debate para aplicar esta prohibición a una entidad que suele organizar actos en interés del barrio.

Las Marchas por la Dignidad, plataforma que integra numerosos colectivos herederos del 15-M y las mareas ciudadanas, entre otros, mostraron ya anteayer su rechazo a la decisión del PP de recurrir contra la autorización y anunciaron su intención de mantenerla, así como de asistir a la concentración de apoyo al derecho a decidir del pueblo catalán del próximo sábado, 30, en la plaza Aragón.