El Gobierno de Aragón aprobó ayer la convocatoria de subvenciones en materia de depuración dirigida a las localidades pirenaicas por un importe de 6,3 millones. De esta forma, la DGA ejecutará de forma directa las depuradoras de mayor tamaño del ámbito pirenaico (las de más de mil habitantes equivalentes), mientras que para las depuradoras más pequeñas habrá una línea de subvenciones para que los ayuntamientos puedan ejecutar las instalaciones, según explicó ayer el consejero de Presidencia, Vicente Guillén, tras la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.

Podrán recibir subvención la ejecución de obras de construcción de nuevas estaciones de tratamiento de aguas residuales urbanas, el acondicionamiento, la ampliación o la mejora de depuradoras de aguas residuales urbanas ya existentes, obsoletas o ineficientes, y los gastos de funcionamiento en pruebas durante un máximo de 12 meses de las instalaciones que se ejecuten o mejoren con cargo a esta convocatoria.

El porcentaje máximo de ayuda a conceder será del 100% o del 95% de la inversión, con un límite de 750.000 euros por solicitud. Según el Ejecutivo, el plazo para presentar las solicitudes será lo suficientemente amplio para que los nuevos equipos de gobierno municipal que se constituyan tras las elecciones puedan analizar necesidades de sus municipios.