La Policía Local de Zaragoza cerró la pasada semana su campaña especial de control de los cinturones de seguridad y sistemas de retención con 65 infracciones detectadas entre 5.575 controles realizados. Fuentes municipales destacaron entre las irregularidades más peligrosas la localización de seis niños, con menos de 1,35 metros de estatura, que viajaban en asientos traseros sin ningún tipo de protección.

Según las conclusiones municipales, los zaragozanos "respetan de manera muy notable" la obligación de llevar cinturón, aunque se considera "necesario" seguir trabajando para reforzar este hábito. De las 5.575 personas controladas, 23 conductores y cuatro copilotos no hacían uso del cinturón --el 0,41% y el 0,07%, respectivamente--, mientras que en los asientos traseros se localizó a 32 pasajeros sin este sistema de protección (0,5%), de los que 25 viajaban en autobús.

Respecto a los menores, la campaña de vigilancia detectó que todos los pequeños que viajaban en el asiento delantero lo hacía de manera correcta, a diferencia de los seis citados en los traseros.

La Policía Local incrementó un 16 % el número de controles respecto a la anterior, de hace unos meses, al considerar que este tipo de medidas obligan a conductores y pasajeros a estar más alerta y no relajar los protocolos de seguridad en los desplazamientos en automóvil por la ciudad.

Los promotores de la campaña recordaron que los cinturones "son una sencilla herramienta de seguridad que, según los expertos, reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente y protege de salir despedido del habitáculo, así como de impactar contra el parabrisas". En ciudad, la posibilidad de resultar herido grave o muerto es cinco veces menor si se lleva puesto.

Los datos porcentuales de las dos últimas campañas reflejan un leve descenso de infractores --1,18% en septiembre del año pasado frente al 1,16% de esta campaña--, a la vez un incremento de la sensibilidad de los conductores hacia esta medida, un 0,41% frente al 0,92% actual.