Pasear ayer por el auditorio de Zaragoza era como trasladarse al mismísimo Picadilly Circus . Gente de todas las edades, ataviada con ropa típicamente británica, rostros extranjeros y un aroma a té de las 5 se respiraba en todo el habitáculo. En el lugar, a pesar del alboroto, se adivinaba un solo espíritu viviendo dentro de los más 500 especialistas: el inglés, un idioma que ayer dejó de serlo para convertirse en una forma de vida, en una alternativa de pensamiento.

Unas ideas y propuestas que se expondrán abiertamente en este congreso, el séptimo que se celebra Esse (European Society for the Study of English) en Europa y que esta vez tiene su sede en la ciudad. Para la presidenta, Susana Onega, que este acontecimiento tuviera lugar en Zaragoza ha sido todo "un logro", ya que competían con países tan preparados como Inglaterra. Y es que el proyecto que se debía presentar para que se eligiera un sitio como ciudad anfitriona, era muy completo. "Estuvimos dos años preparándolo antes de que se aprobara, y en él tuvimos que presentar el presupuesto de los costos, la fecha y su duración, así como las actividades que se realizarían", destacaba.

Ahora que ya se está celebrando, el congreso acoge a unos 500 especialistas que tienen profesiones dispares, aunque las realicen en inglés. En el congreso se pueden encontrar estudiosos de lengua, literatura y cultura inglesas, hasta ámbitos filosóficos, como la teoría crítica. Todos ellos esperaron atentos a que los distintos miembros de la ponencia --entre ellos se encontraban la presidenta, Susana Onega, el director general de investigación, innovación y desarrollo de la DGA, Jesús Santa María, así como el rector de la universidad-- expusieran todas las expectativas y actividades de este encuentro.

La siciliana Mónica Germana, una profesora de inglés en una universidad de Londres, tenía claros los motivos por los que se había trasladado hasta Zaragoza. "He venido porque creo que aquí voy a encontrar mucha gente como yo y también gente de la que he oído hablar por su buena fama en esta disciplina. Además es mi primer año como profesora y tengo mucho que aprender".

Crear sinergias

Para Onega, esta celebración trata de "poner en común las diferentes especializaciones e investigaciones que se llevan a cabo en los 32 diferentes países de los que proceden los expertos y crear así una sinergia de la que todos nos veamos beneficiados". Con esta pretensión se organizaron todas la ponencias, charlas y paneles temáticos con los que contará el congreso, aunque el plato fuerte serán varios personajes famosos que expondrán sus estudios durante los próximos días. El poeta Jacques Derrida constituía una de las principales atracciones, sin embargo, la presidenta afirmaba que no podrá estar en el congreso, aunque "en su lugar vendrán Derek Attridge, J. Hillis Miller y Tony Harrison", tres poetas y teóricos especialistas en la lengua inglesa.

Precisamente, Derrira era uno de los que esperaba ver Isabel Soto, una madrileña que imparte clase de inglés en la Uned. Sin embargo, su ausencia la verá compensada con "la charla sobre frase y música", aseguraba.

Pero para los que aspiren a algo más que aumentar sus conocimientos, la organización del congreso ha preparado varias excursiones por Aragón, con paradas en el Pilar y en Cariñena.