Dos vecinos de Castellón, con antecedentes policiales, ingresaron en prisión como presuntos autores de un delito de robo con violencia e intimidación en grado de tentativa cometido en una sucursal bancaria de la localidad zaragozana de Caspe, el 3 de octubre. Gracias a la descripción física y del coche con el que huyeron, fueron localizados en la entrada del municipio.