El Gobierno de Aragón no ha pagado parte del contrato que rubricó con Hiberus Tecnología, la empresa adjudicataria del Sigad, el nuevo sistema informático de gestión de los centros de Secundaria que está causando numerosos problemas a los institutos. Así lo anunció ayer la consejera de Educación, Dolores Serrat, durante su comparencia en el pleno de las Cortes para responder a una pregunta formulada por CHA, que cuestionó si el departamento iba a pedir responsabilidades a la compañía.

Serrat replicó que la Administración ya las ha exigido y, de hecho, se ha negado a pagar una parte --no especificó la cantidad-- del contrato correspondiente a los 16 meses que lleva implantado el sistema --se instauró como pilotaje en varios centros hace más de un año--. "Durante este tiempo no se detectaron problemas que se están produciendo ahora", explicaron fuentes de Educación.

La consejera admitió que se han sucedido "más problemas de los deseados" y recurrió a dos motivos principales "la complejidad del nuevo sistema, que es muy ambicioso" y porque "se partía de muchos sistemas diferentes que había que migrar al nuevo".

CAMBIO JUSTIFICADO Serrat justificó el cambio de sistema por la obsolescencia del antiguo --el IES 2000--, los complementos propios de cada centro y la decisión del ministerio de dejar de financiar el programa. En este sentido, calificó el Sigad de "muy ambicioso" y agradeció el "esfuerzo" de los equipos directivos de los institutos.

Pero la implantación del nuevo sistema también supondrá un ahorro económico a las arcas autonómicas que la consejera cifró en 37.000 euros anuales después de adjudicarse a Hiberus Tecnología por 637.000 euros en 48 meses --se sacó a concurso público por 800.000 euros--, que, junto a la empresa que gestionó el anterior programa, fueron las únicas que presentaron oferta.

En todo caso, la titular del departamento aseguró que este mes estarán operativas ya "todas las funcionalidades" del Sigad y, de hecho, subrayó que 70 institutos ya pueden sacar los documentos con el nuevo sistema "de forma más rápida que antes". Sin embargo, las quejas de los centros arrecian y los directores ya han advertido de la posibilidad de que la inactividad del nuevo sistema llegue a obligarles a no poder entregar, en diciembre, las notas correspondientes al primer trimestre.