Un error en el inventario del arbolado de Zaragoza está en el origen de la ampliación del contrato para el mantenimiento de las zonas verdes que le va a reportar a FCC un total de seis millones adicionales en los cuatro años por los que se le adjudicó. A razón de 1,5 al año a sumar a los 10,5 en los que se cifra la prestación de este servicio. Y todo porque el ayuntamiento estimó que había 3.136 árboles grandes en la ciudad y ahora, tras revisar e inspeccionar sobre el terreno los datos, se ha comprobado que hay diez veces más, hasta 32.547 unidades a cuidar.

Así lo reconoció ayer el responsable del área de Medio Ambiente, Jerónimo Blasco, al explicar las nuevas necesidades que requiere el servicio, que se han visto agravadas por el estado en que se encuentran muchos de ellos y la "peligrosidad" que esto supone para la seguridad de los ciudadanos. Porque, en lo que afecta a la poda, el contrato contemplaba que se debían podar una media de 305 ejemplares al año para garantizar una periodicidad de 10,5 años y ahora los técnicos municipales han instado a fijarla "entre 4 y 5 años" para un número mucho mayor, hasta 6.871 unidades de media al año. Algo que con los medios humanos y materiales con los que concurrió en el concurso público es imposible de hacer.

Por eso, Blasco justificó que, por una cuestión de seguridad, es necesario hacer frente a este incremento espectacular. Más aún teniendo en cuenta que "en los últimos meses se han derrumbado o retirado más de 200 árboles". Las lluvias, la riada o el viento han evidenciado que existe una alarma que combatir en cuanto a la estabilidad de estos ejemplares y esto se traduce en "180 euros por unidad", lo que equivale a esos 1,5 millones.

Las explicaciones no le sirvieron al concejal Raúl Ariza, de IU, quien destacó que hasta los informes de Hacienda ponen en duda la credibilidad de estos datos surgidos en el inventario y, consideró, que se podría repercutir el coste de este incremento en "las mejoras de 2,5 millones anuales que prometió la empresa" en su oferta, no a costa de engordar su facturación.

"Los árboles son seres vivos, pero no tan vivos", ironizó Enrique Collados, del PP, quien opinó que esta decisión evidencia que el contrato estaba infradotado. Ambos pidieron paralizar la aprobación de este contrato complementario con FCC.