El estreno de la tirolina de Fuentespalda, la más larga de Europa, no podía haber sido más esperanzador. El proyecto impulsado por el ayuntamiento del municipio turolense comenzó su andadura el pasado jueves con una gran aceptación. Tanta que ya tiene «lista de espera». «Los dos primeros días hemos estado completos, así que aconsejamos a la gente que quiera venir que haga sus reservas con bastante antelación», subrayaron ayer a este diario fuentes de la iniciativa. Un proyecto que ha contado con una subvención municipal de 140.000 euros y que aspira a atraer turismo a esta pequeña población del Matarraña (apenas tiene 300 habitantes) y a luchar contra la despoblación.

El éxito comercial de la tirolina ha sorprendido a sus propios promotores. De hecho, y según indicaron las citadas fuentes, ya se han realizado reservas para agosto y septiembre «desde Estados Unidos, Francia, Alemania, Portugal y comunidades españolas como Castilla y León y Galicia».

Por el momento, las reservas deben realizarse en el teléfono móvil 690 982 317, aunque a lo largo de la próxima semana también se podrá gestionar a través de la web www.tirolinafuentespalda.com.

Con dos kilómetros de recorrido y 200 metros de desnivel (la bajada se realiza en menos de dos minutos), la tirolina se ha convertido en la más larga de Europa, algo que tampoco perseguía en un principio la empresa encargada de construirla. «Nos enteramos después», reconocieron las citadas fuentes. Además, la de Fuentespalda es la única tirolina del mundo con estas dimensiones donde también pueden tirarse las personas con discapacidad.

Tirarse por ella a una velocidad que dependiendo del peso puede incluso superar los 130 kilómetros por hora cuesta 25 euros, aunque si se realizan reservas de grupos de diez el precio baja a los 20.

de CINCO a OCHO EMPLEOS/ Cuando esté a pleno rendimiento, la tirolina, cuya edad mínima para tirarse son los 14 años, prevé generar entre cinco y ocho puestos de trabajo. Asentar población era precisamente otro de los objetivos del proyecto impulsado por la alcaldesa del municipio, Carmen Agud (PAR). Por ello, el consistorio cedió los terrenos a la empresa gestora, que ayer no quiso concretar la inversión total destinada al proyecto. Las obras, eso sí, han sido complejas y se han alargado durante casi dos años.

Ahora, sus promotores quieren presentar su flamante tirolina en septiembre con un evento al que aspiran que acudan famosos y políticos. Todo para evitar la lenta agonía de uno de los territorios más despoblados de Aragón.