La recta final de la legislatura será «positiva» en la ejecución de las inversiones en infraestructuras y equipamientos sociales del Gobierno de Aragón, según defendió ayer el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, en el penúltimo pleno de la legislatura. Preguntado por el PP sobre la falta de acción a la hora de construir nuevas residencias o centros de salud, consideró que está logrando el mejor porcentaje de la legislatura, además de adelantar que finalmente se cumplirá el objetivo de déficit. «Ahora aprietan un poco, pero en los últimos tres años y medio han dejado mucho que desear», precisó el diputado popular Antonio Suárez.

«Ustedes dicen cosas que no están justificadas», se defendió el consejero al argumentar que la política presupuestaria implica reflejar «todo el conjunto» de una obra a pesar de que solo se pueda sacar adelante la licitación. «Si alguien ejecutara el 100% de una partida querría decir que no queda nada que hacer el resto de los años», dijo.

Los populares no creen en el insistente optimismo del consejero. «Bulería, bulería, no; será fulería, fulería», le reprochó con humor para recordar que según los propios datos del Gobierno de Aragón la realidad es muy diferente. «Ustedes no han creído en la necesidad de equipamientos, puesto que todo lo han fiado a la necesidad de personal», aseguró Suárez.

Los populares denuncian, por contra, que la ejecución se ha quedado por debajo del año 2015. Y alertan de que este año se dejarán de invertir 84 millones, siendo la ejecución más baja de toda la legislatura. El diputado recordó que sin inversiones en infraestructuras no se pueden garantizar los servicios públicos. «Es lo que realmente mide la gestión de un Gobierno», dijo.

El consejero se defendió citando una ejecución del 88% en el capítulo presupuestario dedicado a las inversiones. «La crisis provocó un corte inversor que ahora hemos podido recuperar en un ciclo nuevo», definió.

SUBIDA DE IMPUESTOS

Por su parte, Suárez lamentó que esta falta de ejecución se haya producido en un contexto de subida de impuestos. «¿Para qué han sangrado a los aragoneses?», le criticó. El diputado del PP también señaló que en inversión civil no se han realizado obras significativas y que tanto en educación como en sanidad «no se ha cumplido la palabra dada» porque esta materia ha sido «el agujero negro de la legislatura».