El consejo de Gobierno ha aprobado el techo de gasto no financiero para el 2020, que asciende a 5.583 millones, lo que supone un incremento del 5,2% respecto al 2019. Esta es la cantidad que la administración podrá gasta el próximo año y que tendrá que ser aprobada en el próximo pleno.

Se trata del primer paso que da el cuatripartito de cara a la elaboración de los presupuestos del 2020 que el consejero de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, quiere que estén en vigor el próximo mes de enero, después de que la comunidad autónoma lleva un año funcionando con las cuentas prorrogadas del 2019.

Pérez Anadón ha explicado tras la celebración del consejo extraordinario que se trata de un trámite previo y necesario para la posterior aprobación del presupuesto autonómico que, ha dicho, será “prudente”, “pegado a la realidad” y con el que pretenden mantener la presión fiscal.

Para el titular de Hacienda, el techo de gasto aprobado refleja “unas estimaciones prudentes y acompasadas con el crecimiento del PIB” y supone un incremento de 276 millones más respecto al 2019 (prórroga del 2018). El total resulta de las aportaciones de los ingresos que provienen del sistema de financiación autonómica (3.954 millones) y de las ayudas finalistas (788), entre las que destacan la PAC, la dependencia y los distintos fondos europeos.

También son fruto de la recaudación de impuestos (511 millones), las tasas, los precios públicos, las prestaciones de servicios, las multas, sanciones e ingresos patrimoniales, que suponen un ingreso de 118 millones. En el primer caso, la comunidad autónoma ha reducido sus beneficios un 8,45%, es decir, que este año las arcas públicas han recibido 47 millones menos, principalmente por los cambios normativos en el impuesto de sucesiones y donaciones y por la sentencia del Tribunal Supremo que afecta a las hipotecas.