La obra social de Ibercaja colabora con 3.000 euros en un proyecto de Unicef dirigido a mejorar la educación de los niños y adolescentes de las familias excluidas de la zona fronteriza de la República Dominicana.

Teresa Fernández, directora de la obra social de Ibercaja, y Pilar de la Vega, presidenta de Unicef Aragón, firmaron ayer convenio para apoyar el programa llamado La comunidad educativa que aprende.

Unicef desarrolla este proyecto en las zonas fronterizas y marginales de las provincias de Santo Domingo, Santiago, Elías Piña y San Juan. El principal objetivo, según explicaron a través de un comunicado, es que los niños y adolescentes de estos territorios reciban una educación de calidad e inclusiva.

Los principales beneficiarios del proyecto son los 120.000 niños de nivel básico y los 100.000 niños de 0 a 5 años que registra la población escolar, así como el resto de integrantes que componen la comunidad.