La Guardia Civil investiga a un hombre, de 56 años, como supuesto autor de un delito contra la protección de la flora, fauna y animales domésticos. La operación ha sido nombrada como “ALDICA”. Al parecer, el supuesto autor provocó la muerte a dos perros, tras mezclar unas semillas con veneno. Los canes eran pastores alemanes de un año y medio y tres años, respectivamente.

El Seprona de Fraga Fraga instruyó diligencias que fueron entregadas en los Juzgados de Fraga.

La investigación comenzó cuando el dueño puso una denuncia, al ver que sus animales habían sido envenenados.

Así, los agentes de Fraga observaron cómo en una finca cercana al lugar donde los perros habían paseado antes de intoxicarse, había varios montones grises de aspecto arenoso, mezclados con semillas.

De este modo, con un perro especializado en detección de venenos, la Guardia Civil comprobó que se trataba de una sustancia venenosa. Los agentes tomaron muestras para enviarlas a analizar. Por otro lado, se realizó una autopsia a los canes muertos. También, en la misma finca, se hallaron varios frascos de este mismo veneno.

De este modo, la autopsia de los perros presenció que los animales habían estado en contacto con un pesticida de uso restringido por su toxicidad. Se trata de un plaguicida que hace tiempo se empleaba para matar insectos, pero que desde hace años estaba prohibido por ser tóxico a personas, animales y flora.