El presidente de Aragón y secretario general del PSOE en la Comunidad, Javier Lambán, ha alabado el mensaje de "moderación y centralidad" que el presidente de España, Pedro Sánchez, está tratando de lanzar a los españoles después de demostrar que "no está dispuesto a ceder absolutamente nada ante los independentistas".

En declaraciones a los medios, Lambán ha asegurado que Sánchez, "contradiciendo los pronósticos agoreros de la derecha", ha demostrado que "no está dispuesto a ceder absolutamente nada" ante los independentistas, y así se ha constatado cuando el presidente ha rechazado "de plano" sus condiciones y "no las ha cambiado ni por los presupuestos ni por la estabilidad parlamentaria".

Ante ese mensaje de "moderación y centralidad" que alaba de Sánchez, Lambán muestra su preocupación por "los extremos" y por la "triple derecha", que "se está radicalizando de una manera sorprendente".

También ha criticado al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, quien ha dicho que con el sanchismo "no se puede pactar", según ha recordado Lambán.

A juicio del presidente aragonés, "no es propio" de un partido anunciar con quién va a pactar o no tras las elecciones, como tampoco lo es que esté dispuesto a aliarse "con la extrema derecha de Vox", siendo que Ciudadanos nació "con un claro sesgo reformista e incluso socialdemócrata", según Lambán.

Por eso, ha asegurado que no entiende cómo Rivera "se hace fotos" con "tanta naturalidad" con Vox, una extrema derecha "que tanto asusta" y a la que se aísla en Europa.

Lambán, además, ha vuelto a mostrar su apoyo a Sánchez en la elección de la fecha elegida para los comicios generales, el 28 de abril, y ha insistido en que la maquinaria del PSOE de Aragón está "lo suficientemente entrenada" como para preparar las listas "a contrarreloj, escalando montañas y subiendo al llano".

Y se ha mostrado convencido de que después de las elecciones, si en los partidos prevalece la defensa del interés general y se asume la gravedad de los desafíos que tiene el país, se podría conformar Gobierno "en una semana". Porque ante esos problemas, ha añadido, se quieren "gobiernos fuertes, pero sobre todo moderados y sensatos".