"Los aragoneses estamos bien preparados para la vuelta a la normalidad por el buen trabajo de todos los sectores de la población". Esta es la principal conclusión expresada por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán. En un debate parlamentario propiciado por el PP y Ciudadanos, centrado en el turismo y la recuperación económica, el dirigente socialista ha reconocido que en este momento "Aragón tiene muchos aragoneses que no trabajan", pues se ha pasado de estar por encima de la media a tener una situación complicada que requiere "esfuerzo y generosidad".

En relación con el turismo, los autónomos y las pequeñas y medianas empresas ha defendido la labor que se está realizando por parte de todas las administraciones, sobre todo gracias a mantener los ERTE más allá del estado de alarma. "Desde el Gobierno de Aragón hemos tratado de adoptar las medidas más favorables para los sectores, intentando que la vuelta a la normalidad fuera más beneficiosa para el medio rural", ha señalado.

De hecho, defender la capacidad de recuperación turística ha sido uno de los vectores principales en la intervención del presidente autonómico. Aunque ha considerado que se podrían mejorar algunas cuestiones relativas a la movilidad, como ha sucedido en el País Vasco. "Creo que la evolución de los ritmos de la vuelta a la normalidad debe estar motivado por dictámenes estrictamente sanitarios", ha manifestado al cargar contra las presiones de los sectores nacionalistas.

La intención de la comunidad es garantizar una desescalada paralela en todas las zonas, siempre que sea posible. Esto implica "avanzar sin correr ningún riesgo sanitario" para evitar que la caída en el pozo sea lo más profundo posible, ha precisado Lambán, y ha manifestado que se está intentando aplicar medidas de la fase 3 en esta fase actual. Algo que implicaría reducir restricciones en el medio rural, recuperando cuanto antes la movilidad interprovincial al considerar que eso tiene que ver con la recuperación de la normalidad en el "pilar del turismo", un sector no tan importante como en otras zonas de España pero de gran peso en la economía.

La mirada en la actualidad está puesta en la cultura, la hostelería y el turismo rural, pues son factores de diferenciación frente a las comunidades costeras, que dependen mucho más de la llegada de visitantes de fuera. También se confía en que la próxima temporada de nieve discurra con total normalidad. Lambán ha dicho que se está trabajando en líneas de liquidez para las empresas y en que los fondos europeos que se han anunciado favorezcan a la comunidad "lo máximo posible".

A pesar de las alusiones llegadas desde el PP y Ciudadanos ha señalado que no tiene intención de hablar del Gobierno de España, del que ha considerado que no está "auspiciando" un cambio de régimen. Ha procurado que sus expresiones en ese sentido fueran mínimas, aunque eso sí, Lambán ha dicho que el pacto con Bildu ha sido "agua de borrajas" por lo que no se producirá una reforma integral de la reforma laboral. "Siempre trato de ejercer como presidente de Aragón y no se me podrá reprochar no ser claro", ha explicado.

Además, y porque es es difícil que los muros de la Aljafería sean ajenos al ruido mediático, ha acusado a los populares de enrarecer el debate en medio de la pandemia con alusiones como las de la diputada estatal Cayetana Álvarez de Toledo sobre el padre del vicepresidente Pablo Iglesias.

En este contexto la oposición sigue manteniendo un difícil equilibrio entre la crítica y el apoyo, sin que se resienta la convivencia política de la comunidad. Para eso es mejor lanzar los dardos pensando en lo que pasa en Madrid y tender la mano cuando se habla de Aragón. El portavoz del PP, Luis María Beamonte, ha indicado que el Gobierno de España está poniendo en cuestión el "marco de convivencia" y ha alertado que muchos aragoneses "no pueden trabajar" con la actividad reducida que todavía se mantiene. Además, ha acusado a la DGA de que los presupuestos no se corresponden con la realidad. "Necesitamos resortes suficiente para plantear la nueva realidad económica de la comunidad", ha propuesto.

Por estos motivos, Beamonte ha asegurado que la comunidad está "fracasando en la gestión" por lo que le pidió "dejar de improvisar". De este modo se ha comprometido a que Lambán tendrá los votos del PP "si decide andar otros caminos", reclamando un cambio en sus actuales alianzas.

Mucho más duro se ha mostrado al fijar la mirada en lo que sucede en el resto de España. La crítica popular se han centrado en el "tabú del pacto con Bildu" que ha roto Pedro Sánchez. Ha advertido que no será "gratis" al verlo "un sainete de manifestaciones", en bastantes casos contradictorias. Ahí han entrado también las dimisiones en la Guardia Civil y la gestión del Ministerio del Interior. "Usted es consciente, señor Lambán, que el Gobierno de España nos está llevando al abismo", ha incidido al pedirle que no escurra el bulto ante lo que está pasando.

El portavoz de Ciudadanos, Daniel Pérez Calvo, ha centrado su intervención en el plan turístico del Gobierno de Aragón. Y eso a pesar de las alusiones del PP en relación a sus pactos con Sánchez. Desde la formación liberal creen necesario articular una respuesta concreta ante las medidas agresivas de otras comunidades para promocionar su turismo. "Lo que hemos conocido aquí es un documento plagado de buenas intenciones", ha manifestado, aunque con la salvedad de que la realidad del sector se está viviendo "con muchas inseguridades".

Los liberales han dicho que no se fían de la gestión que está haciendo Sánchez de la desescalada, aunque sí de lo que pueda plantear Lambán. Por eso ha reclamado cuidar el turismo de interior, al ser "la joya de la corona", algo que se tiene que lograr en una "dura competición" con otras comunidades.

Por parte del portavoz de IU, Álvaro Sanz, se ha pedido "limpiar de ruido" la escena pública al recordar que la pandemia todavía no se ha superado. Esto implica "buscar salidas colectivas" sin bajar la guardia para que nadie se quede atrás. Por eso ha pedido garantizar derechos económicos, sociales y sanitarios.

Previamente se ha rechazado una iniciativa de Vox para crear una comisión sobre el tratamiento de la pandemia, pues la mayoría de los grupos parlamentarios han entendido que no es un instrumento adecuado en estos momentos ya que existen unos Pactos del Pignatelli que finalmente la formación ultra abandonó. Los reproches por su actitud han sido generalizados.

Por contra, sí que ha salido adelante la propuesta popular de crear una comisión de estudio para renovar la red de residencias en la comunidad. La diputada Marián Orós ha lamentado que el covid-19 ha sido "devastador" para las personas mayores. A través de una mesa de estudio creen importante escuchar a todos los implicados, también a las empresas gestoras.