Una de las medidas más importantes enmarcada en el plan de racionalización puesto en marcha en el 2011 es la relacionada con la mejora de la gestión en la compra de bienes y servicios. El Departamento de Hacienda y Administración Pública, en colaboración con todas las áreas del Gobierno, ha realizado un "considerable esfuerzo", explicaron desde la consejería, para "mejorar la organización en este sentido, con la aplicación de economías de escala".

Esto se realiza, detallaron, a través de las compras centralizadas, que permiten "conseguir mejores precios por los mismos productos y servicios". En algunos casos se han unificado las compras que anteriormente se realizaban de forma descentralizada.

En otros casos, en los que ya se gestionaba de forma centralizada, se han revisado las contrataciones y se ha analizado la oferta del mercado para optimizar la gestión del dinero público. Además, explicaron, "en todos los casos se ha hecho hincapié en racionalizar el uso de los bienes y servicios en el trabajo diario de la Administración autonómica".