Al utilizar el ordenador, el centro del monitor debe situarse por debajo de la altura de los ojos. Así se logra un mejor margen de visión y se protegen las vértebras lumbares y cervicales. La distancia recomendable entre la cabeza y la pantalla es de 50 a 70 centímetros, aunque ello depende obviamente del tamaño del monitor. La televisión no debe mirarse desde muy cerca. La distancia mínima recomendada son los tres metros. El monitor, por debajo de la altura de los ojos.