«Y a no queda nada que analizar». Esta es la opinión mayoritaria entre los equipos negociadores de las fuerzas aragonesas tras las elecciones del domingo 26 de mayo. Con las prioridades de pacto anunciadas por todos los partidos, solo queda que los contactos esporádicos que tienen los líderes fructifiquen. Por eso defienden que airearlos sería «contraproducente».

La formación en la que más atención se ha puesto en los últimos días considera que ahora son el resto de partidos los que tienen que ponerse en contacto con ellos para avanzar en un posible pacto. O al menos así lo explicaron ayer fuentes del PAR tras recordar que la reunión de dirección que realizaron el pasado jueves ya sirvió para repasar el complicado panorama actual. Tras esa cita el presidente del partido, Arturo Aliaga, manifestó que desde un punto de vista personal la alianza más viable es la del PSOE con Ciudadanos.

Sin embargo, las cosas no están cerradas y la cautela se impone. En el momento en el que Aliaga realizó su análisis, voces internas del partido criticaron su intervención porque supone rechazar de plano la alianza a la derecha.

COMISIONES NEGOCIADORAS

Más allá del paso a un lado de los aragonesistas, el resto de los partidos ha dejado en manos de las llamadas comisiones negociadoras la evolución de los pactos. Están en juego muchos partidos y las alianzas en otras comunidades autónomas o en los principales ayuntamientos podría ir decantando las investiduras.

La próxima cita de importancia se producirá el sábado 15 junio, cuando se tengan que constituir los ayuntamientos de todo el Estado. Tanto en Zaragoza como en Huesca el próximo alcalde también depende de que la balanza de Cs se decante por favorecer a los candidatos socialistas o por certificar pactos a la andaluza haciendo buenos los votos de Vox. No es fácil y la formación de ultraderecha criticó ayer que en la capital oscense nadie les haya consultado para lograr acuerdo.

El presidente de la DGA en funciones, Javier Lambán, mantendrá esta semana su agenda institucional y no se espera que lance los guiños que estaría esperando el candidato de Cs, Daniel Pérez, para decantarse por favorecer su reelección. El aspirante de la formación naranja quiere hacer valer su crecimiento en la comunidad y para eso tiene fijada la mirada en el centroderecha.

Al margen de estas cuitas ha quedado Podemos en Aragón. Nacho Escartín ha reconocido que los resultados electorales han sido muy malos y que necesitan un cambio de rumbo. En un consejo ciudadano realizado el pasado sábado aseguraron que harán lo posible para lograr un pacto con la izquierda en el que es necesaria una abstención del PAR. Mientras tanto, toca esperar.