El grupo municipal del Partido Aragonés (PAR) ha decidido sumarse a la ya larga lista de denunciantes que durante los últimos meses han criticado el mal estado que presenta el camino de Miraflores, ubicado en el barrio de San José. Tras una reciente visita realizada por la concejala aragonesista Elena Allué a la zona, la edil ha exigido al Ayuntamiento de Zaragoza que convoque a una reunión al Sindicato de Riegos de Miraflores (propietario de la mayor parte de este trazado) para acordar el modo en el que debe acondicionarse el vial.

Se trata de un camino utilizado habitualmente como atajo por numerosos conductores para acceder al tercer cinturón. Pese al elevado volumen de tráfico que soporta tanto de turismos como de camiones, carece de señalización y en algunos tramos el nivel de compactación no es el más apropiado

"Es tercermundista. Muchos vecinos, sobre todo los que viven en la parte más alta del barrio, utilizan esta vía para salir o entrar en San José, porque les resulta mucho más cómodo hacerlo así que bajar hasta el pabellón Príncipe Felipe", denunció Elena Allué. "¿Hasta cuándo van a tener que seguir soportando esta situación?", se preguntó la concejala.

En opinión de la edil aragonesista, el consistorio zaragozano debe solicitar de inmediato al sindicato de riegos la autorización correspondiente para acometer el arreglo de este camino e incluso estudiar la posibilidad de asfaltarlo.

Antes que el PAR, numerosos particulares e incluso la Asociación de Vecinos de San José han reclamado el acondicionamiento del camino. No obstante, desde el colectivo vecinal siempre han insistido en que el problema se evitaría prolongando la avenida de Tenor Fleta hasta el cuarto cinturón, cubriendo las vías del ferrocarril.

Con esta actuación, los vecinos de la parte alta del distrito dispondrían de un acceso directo a la ronda de Hispanidad y no tendrían que recurrir a la utilización de atajos, a veces peligrosos, como el del camino de Miraflores.

PRECAUCION JUNTO AL COLEGIO La concejala aragonesista advirtió también de la necesidad de extremar la seguridad vial en el tramo del camino que está más próximo a la salida del barrio, ya que hay un centro escolar al que acuden numerosos niños y adolescentes a recibir sus clases en esta misma zona.

Elena Allué ha propuesto reducir en este tramo los límites de velocidad mediante la instalación de una señalización completa y la puesta en marcha de medidas que garanticen al máximo la seguridad de los escolares.