La Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior mantiene el aviso de grave riesgo de incendios durante todo el fin de semana en todo Aragón pese al anunciado descenso notable de las temperaturas máximas especialmente el domingo.

Esa previsión hizo que ayer el Gobierno de Aragón estableciera la prealerta roja para adoptar todas las medidad posibles de precaución en todas las comarcas de la comunidad. Las elevadas temperaturas, la intensa actividad eléctrica con numerosas pequeñas tormentas y los vientos compusieron una jornada propicia para que cualquier pequeño conato de incendio se hubiese podido complicar.

En la jornada de ayer, Zaragoza rozó los 37 grados (36,9 grados) de temperatura máxima a las 16.00 horas en la estación meteorológica de Valdespartera. Fue una jornada de intenso calor, vientos fuertes y pequeñas tormentas secas con abundante aparato eléctrico. Precisamente varios rayos provocaron ayer sobre las 20.00 un incendio en una zona de matorral entre Cadrete y Santa Fe próxima a unas naves. Hasta ese punto se desplazaron 6 vehículos de bomberos que se encontraron un escenario complicado por tratarse de una zona de olivos, rastrojos y cañales de difícil acceso. Los bomberos se desplazaron a la zona y al filo de la media noche seguían trabajando sobre el entorno vegetal quemado para evitar que las llamas se reavivaran. Otro rayo provocó un pequeño incendio en la zona de los depósitos de Valdespartera, pero sin mayores consecuencias.

Por su parte, Híjar, con 39,2 grados, marcó una de las temperaturas más altas de toda la región, seguida de Daroca, con 37,1 grados. Según la Aemet, a partir de mañana domingo, se prevé un descenso acusado de las máximas temperaturas en el valle del Ebro por el retorno del viento del norte.