El mismo día en el que seis comunidades autónomas decidían dejar de suministrar la vacuna de AstraZeneca, por su presunta relación con casos de trombosis detectados en Dinamarca y Austria, en Zaragoza varios agentes de la Policía Nacional era vacunados con el controvertido lote. Un suministro que se extendería a buena parte del cuerpo que ya ha sido vacunado en días anteriores, según señalan desde los sindicatos SUP y UFP.

Desde el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón se reconoce que el Salud la ha inyectado porque el suero fue distribuido por toda España e insistieron en que «no hay ninguna alerta sanitaria a nivel europeo ni en España al respecto» como para tomar decisiones en la misma línea que la Comunidad Valenciana, Andalucía, Cataluña, Asturias y Castilla y León.

Por el momento se desconoce el número de agentes que la han podido recibir por el sistema de vacunación adoptado. En Aragón los agentes están registrados en el sistema y acuden a un centro de salud, mientras que, por ejemplo, en la Comunidad de Madrid se ha llevado a cabo por grupos policiales citados a una hora y un mismo día en un mismo lugar. La mayoría en el Wanda Metropolitano. Esto conlleva que allí se conozca que, por ejemplo, a la Unidad de Intervención Policial (UIP) se la ha suministrado con el lote ABV5300. No obstante, desde la DGA apelan a que no se han registrado hospitalizaciones relacionadas con la causa.

La respuesta de la ministra Darias

De hecho, desde el Gobierno de Aragón destacan que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, señaló este viernes, en una entrevista en RNE, que la vacuna de AstraZeneca es «segura» y así lo dice la Agencia Europea del Medicamento (EMA), que ha puesto de manifiesto que «no hay relación causal entre el evento trombótico y la vacuna en sí». Por tanto, reiteró el mensaje de «prudencia y tranquilidad» y máxima vigilancia.

Darias recalcó que el ministerio y la EMA hacen un seguimiento de farmacovigilancia «permanente» desde que se administra cualquier vacuna, por lo que no se pondrá en marcha ningún proceso concreto porque el que hay es ya «muy potente». Respecto al hecho de que la EMA se haya dado 14 días para establecer una recomendación general sobre la vacunación de AstraZeneca y si España finalmente la va a aplicar a mayores de 55 años, Darias dijo que el Gobierno se dará «un tiempo de espera» en función de lo que diga la EMA «y a partir de ahí actuaremos».

Frente a ello están Austria, Dinamarca, Estonia, Lituania, Luxemburgo, Letonia y Bulgaria (además de Islandia y Noruega) optaron por suspender la vacunación con este lote.

Italia por su parte ha paralizado las inyecciones de otro lote (ABV2856), tras varias muertes en Sicilia. Pese a las crecientes dudas en algunos países solo se habían notificado 30 casos de afecciones relacionadas con trombosis entre los 5 millones de personas vacunadas con el antídoto de AstraZeneca, un número que no es superior al que se puede ver en la población general.

El jefe de Enfermedades Infecciosas del Hospital Vall d’Hebron, Benito Almirante, señala que «con la vacuna del sarampión, de cada millón de dosis, hay un niño que tiene encefalitis. Pero sin ella, el sarampión afectaría a uno de cada 10.000 niños. El beneficio es mucho mayor. Aun pudiéndose demostrar la causalidad de AstraZeneca con los trombos, eso no impediría la vacunación».

Los guardias civiles de Aragón se vacunan el lunes

Los 3.190 miembros de la Guardia Civil de Aragón están sin vacunar contra el coronavirus, mientras ven como a sus compañeros de la Policía Nacional y policías locales de otros municipios ya lo están siendo. Si nada falla, el lunes comenzará después de que el Instituto Social de las Fuerzas Armadas (ISFAS) retrasara la comunicación a los agentes para iniciar el suministro.

El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón ya tiene cargados en el sistema de autocita a los agentes de la Benemérita, según fuentes consultadas. Esto conlleva que podrían citarse ya los menores de 55. Para ello precisan un número AR de identificación personal que ya se les ha asignado y que les tiene que suministrar el ISFAS. Asociaciones profesionales como Jucil o la AUGC han remitido sus respectivas quejas a los responsables sanitarios porque entienden que «no se está valorando el esfuerzo realizado por los agentes durante la pandemia».