El presidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), Miguel Gracia, se encuentra aislado en su domicilio de Arén, pueblo de la Ribagorza del que es alcalde, tras dar positivo en coronavirus el pasado jueves.

Ese día, sobre las 11 de la mañana, se encontraba presidiendo un pleno presencial de la corporación provincial cuando empezó a sentir pequeñas molestias. Por eso, nada más terminar se dirigió al hospital San Jorge de la capital oscense, donde le practicaron pruebas y detectaron que estaba contagiado de covid-19 de forma leve.

Fuentes de su entorno señalaron que Gracia se notó síntomas como un pequeño catarro y dolor de cabeza, por lo que decidió acudir al centro sanitario. "Se encuentra bien", añadieron.

El pleno de la diputación se celebró con 20 de los 25 representantes de la institución, dado que los de la parte oriental de la provincia no acudieron a la sesión.

El pleno se llevó a cabo respetando la distancia de seguridad y todos los diputados llevaban mascarilla, incluyendo al presidente, explicaron en la DPH.

Dos días antes, Miguel Gracia había estado, asimismo en Huesca, en un acto de entrega de material de montaña a los grupos de rescate de la Guardia Civil en la provincia (GREIM), en el que asimismo se siguieron las normas que regulan este tipo de eventos desde el punto de vista sanitario.

En la jornada de hoy, debido a su estado, el máximo representante de la institución provincial no ha podido asistir, como estaba previsto, a la visita que el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha realizado a las obras de la estación de Canfranc.

La sala de plenos de la Diputación de Huesca es de forma circular y está ubicada en un edificio reformado en profundidad hace unos años. Al comienzo del confinamiento, se reconfiguró con el fin de garantizar al menos dos metros de distancia entre los asistentes a las sesiones.