Representantes de las Ampa de los centros educativos Ribagorza Oriental, Violada-Monegros y colegio público de Boltaña, acompañados por los alcaldes Gurrea de Gállego, El Temple, Boltaña y Benabarre, se reunieron el pasado miércoles con el Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, con el fin de solicitar la mediación de esta institución para evitar el cierre del primer ciclo de la ESO en dichos municipios.

"No entendemos que Educación tome la medida de cerrar aulas y elimine servicios que afectan a unos 40 alumnos en toda la provincia de Huesca. Creemos que es una discriminación que no aporta nada a la calidad de la enseñanza y que pone serias dificultades el mantenimiento de las escuelas rurales, siendo un golpe mortal para las pequeñas poblaciones", señalaron los afectados.

Por otro lado, expresaron su temor ante el descenso de alumnos y las ratios permitidas por el departamento de Educación. "Si en estos años el número de escolares es menor, los datos nos dicen que dentro de muy poco se van a cumplir los ratios que la Administración exige", apuntaron. Las Ampa de los diferentes centros afectados tienen previsto reunirse próximamente con los grupos políticos en las Cortes de Aragón y, nuevamente, solicitarán un encuentro con la consejera de educación, Dolores Serrat.