El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha decidido poner en manos de los tribunales las polémicas acusaciones que el líder del PP a nivel nacional y candidato a la presidencia del Gobierno de España, Pablo Casado, vertió contra su persona acusándole de ser «amigo del GRAPO» en un mitin que ofreció en la capital aragonesa el pasado 16 de febrero. El primer edil ya ha solicitado celebrar el acto conciliatorio previo a la interposición de una querella criminal contra el conservador por «un presunto delito de injurias graves con publicidad», tipificado en la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

El escrito fue enviado, tal y como adelantó ayer Efe, el pasado día 21 al juzgado de primera instancia de Madrid «que corresponda» y que pide que juzgue lo acontecido en aquel mitin en el Palacio de Congresos de Zaragoza. Y acompaña al mismo tres documentos probatorios, entre ellos el audio completo y reducido del discurso de Casado aquel día y ejemplares de medios de comunicación que reflejaron tales afirmaciones. Y haciendo especial hincapié en la frase literal que le señala como afín a la banda terrorista, ya que aseguró que Santisteve es «conocido por ser amigo del GRAPO y por hacerle un homenaje a una presa del GRAPO, a unos de Alsasua e intentar incluso, tal y como hace Carmena (la alcaldesa de Madrid) y, por supuesto, Ada Colau (la de Barcelona) decir que Zaragoza es un sitio amable para los independentistas».

"CONSIDERABLE DAÑO"

El alcalde de la capital aragonesa responde en su escrito que tal afirmación «presuntamente constituye una grave injuria, en absoluto cierta» y que la publicidad que ese mitin tuvo, en los medios y en las redes sociales, «ha causado un considerable daño moral» hacia su persona y hacia el propio ayuntamiento. «Particularmente doloroso», añade el escrito, por el recuerdo del sufrimiento que esta banda criminal causó en el pasado a los ciudadanos y familiares de las víctimas, y por la «crispación política y evidente daño a la proyección pública» del alcalde que estas palabras generaron.

Por eso solicita activar la tramitación normal de una querella criminal, que siempre incluye un acto de conciliación previo en el que Santisteve exigirá a Casado que retire esas palabras, y que este acto se solicita a solo 18 días de que comience la campaña electoral para el líder del PP que opta a la presidencia del Gobierno. Aunque el alcalde considera que ese daño moral le perjudica a él en un proceso electoral como el que él tendrá que afrontar solo un mes después, si finalmente se confirma como candidato de Zaragoza en Común (ZeC) a la Alcaldía de la capital aragonesa, en un proceso de primarias ahora abierto en la confluencia de izquierdas. Así, que los tribunales deberán dictar cuándo se produce ese acto de conciliación si estiman la solicitud del alcalde.

Las palabras de Casado surgen a raíz de que el ayuntamiento autorizara la celebración de una conferencia que impartió en noviembre del año pasado en el Centro Social Comunitario Luis Buñuel una exmiembro del GRAPO, Carmen López, condenada por delitos de sangre. Los organizadores la presentaron como «presa política» en unas instalaciones que sí son municipales pero que están cedidas «legalmente» a una asociación.

Santisteve añade que él «no tuvo nada que ver» con las jornadas organizadas, ni existe vinculación alguna con la asociación que gestiona el centro, de la que dejó de formar parte en 2014.