La Comisión de Peticiones de la Unión Europea pedirá información a España sobre la seguridad en el pantano de Yesa y el cumplimiento de la legislación europea sobre riesgo de inundaciones a raíz de una queja al Parlamento Europeo.

Las organizaciones Río Aragón, URA-Nueva Cultura y la iniciativa ciudadana Yesa+no, Lanak Gelditu remitieron una queja por vulneración de la directiva relativa a la evaluación y gestión de los riesgos de inundación, por los hechos que tienen lugar en el entorno de la presa de Yesa (Navarra), en alusión a los deslizamientos detectados en una ladera durante las obras de recrecimiento del pantano.

En respuesta a una pregunta realizada en el marco del Parlamento europeo por el europarlamentario Iñaki Irazabalbeitia, de la coalición Europa de los Pueblos-Verdes, la Comisión de Peticiones señala que "son los propios estados miembros los que deben determinar los objetivos relativos a la gestión de los riesgos de inundación, y hacerlo teniendo en cuenta las circunstancias locales y regionales".

No obstante, anunciaba su intención de ponerse en contacto con las autoridades españolas para solicitar más información, un gesto, según señala Río Aragón en una nota de prensa, "poco común" en este tipo de respuestas y "una muestra de que en Europa se comprende que la situación es más grave de lo que el Gobierno español quiere hacer ver".

Río Aragón señala asimismo que la respuesta contrasta con la actitud mantenida por el Partido Popular cuando Irazabalbeitia intentó que la queja presentada por esas asociaciones fuera tratada de urgencia "debido a la gravedad de los hechos ocurridos", al evitar, con el uso de su mayoría, que esta cuestión pudiera ser tratada esta legislatura.

Estas asociaciones esperan que la queja se retome al comienzo de la próxima legislatura y se investigue lo ocurrido "lo antes posible", ya que el deslizamiento de la ladera "no sólo no se detiene, sino que muestra un comportamiento impredecible con aumentos de la velocidad como ha ocurrido en el mes de marzo".

Las organizaciones critican que se haya multiplicado el presupuesto a pesar de que las obras de recrecimiento no puedan avanzar y que ponen "en peligro" a las poblaciones aguas abajo cada vez que se inicia una nueva fase.

En concreto, la sensación de peligro es muy fuerte en Sangüesa, situada a orillas del río Aragón, y donde un fallo en la presa tendría consecuencias catastróficas, según las entidades que llevan adelante la iniciativa ante las instituciones europeas para detener el proyecto.