Más espacios que limpiar con menos personal y menos horas de trabajo al año. Es la situación de las trabajadoras de limpieza del sistema sanitario aragonés que ayer explicó la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de la Unión General de Trabajadores en Aragón (FeSMC-UGT Aragón) en la comisión de Comparecencias Ciudadanas de las Cortes de Aragón. Según denunciaron, mientras en el 2010 el servicio contaba con 1.038 trabajadores fijos, en el 2016 la cifra se redujo a 827, un 21% menos, y desde entonces no ha remontado. Además, señalaron, cada vez más estos profesionales «asumen tareas propias de auxiliares de enfermería». Por ello, reclamaron que el Salud saque un nuevo pliego en el que sea la Administración la que defina el número de horas de trabajo anuales, y no las empresas.

Esteban Lauroba, secretario de la Federación de Servicios de UGT Aragón, ejemplificó la merma de personal que se viene produciendo en los últimos años a través de la situación de tres de los grandes hospitales de Aragón.

En el Miguel Servet de Zaragoza, mientras en el 2011 se ofertaron 523.000 horas de trabajo para 342 trabajadoras fijas, en el 2016 se ofertaron 400.000 horas, con 237 trabajadoras fijas; 105 menos. Una situación similar en el hospital Clínico, donde se pasó de 295.000 horas al año y 136 trabajadoras fijas, a 253.000 horas y 125 trabajadoras en el 2016 que se mantienen hoy en día. Por último, en el Royo Villanova, la reducción pasa de 82.000 horas trabajadas al año en el 2011, con 51 trabajadoras, a 60.000 horas con 39 trabajadoras. Una situación que conlleva a una «limpieza muy deficiente en zonas calificadas de alto riesgo». Y que adquiere «aún más importancia» en la pandemia.

La organización sindical puso de relieve el cambio de tendencia en el 2016, cuando el pliego dejó «al albur de las empresas contratistas» la definición de cuántas horas de trabajo son necesarias para mantener limpios los centros sanitarios. «Una aberración que va camino de repetirse en el 2021», denunció Lauroba, quien reclamó que se deje «sin efecto» la convocatoria y se elaboren de nuevo los pliegos para que sea el Salud quien lo defina.

Todos los grupos parlamentarios compartieron las reivindicaciones del sindicato. Desde IU, Álvaro Sanz reclamó que se «fiscalicen los contratos» e Isabel Lasobras (CHA) pidió que sea el Salud quien fije las condiciones. Nacho Escartín (Podemos) llamó a «mejorar los pliegos» y abogó por «internalizar el servicio». Desde Vox, Santiago Morón pidió responsabilidades «tanto a la empresa como a la Administración». La diputada de Cs, Elisa Sacacia, pidió «mirar con lupa estos incumplimeintos y sancionar» si es necesario, una máxima compartida por el diputado popular José Antonio Lagüens. El diputado socialista Sergio Ortiz llamó a «revertir entre todos la degradación de la calidad en este servicio tan importante».

El absentismo se cronifica en el 20% por las bajas

El absentismo en el sector de la limpieza en centros sanitarios está cronificado desde hace años en torno al 20% de la plantilla, aunque esta cifra se redujo durante los meses más duros de la pandemia, aseguran desde UGT, por la «responsabilidad de las trabajadoras». Detrás de esta cifra se encuentran según el sindicato «la sobrecarga de trabajo, la edad media envejecida de las trabajadoras y la poca inversión en salud de las empresas».