-¿Cómo se encuentra de su lesión en el costado?

-Estoy recuperado. El día de Salónica tuve un poco de restricción de minutos porque casi no había entrenado y no sabíamos cómo iba a reaccionar. Era importante y quería jugar. El último día contra Manresa, sin ningún problema. Sí es verdad que me falta un poco de ritmo y esta semana me va a servir para coger continuidad pero ya no noto nada.

-Su deseo era volver a Zaragoza, ¿está contento con los 3 años firmados con el Casademont?

-Sí, la verdad es que estoy muy contento. Llevaba mucho tiempo fuera, era el momento perfecto para volver a casa. Además el proyecto que está construyendo el Basket Zaragoza es muy atractivo, no solo para mí como zaragozano sino para cualquiera que dispute la Liga Endesa. Las negociaciones fueron muy fáciles, hablé con Pep, me explicó lo que querían de mí y creo que la decisión fue muy acertada.

-Tuvo que salir para labrarse un futuro profesional y ahora regresa, ¿qué significa volver en la parte final de su carrera?

-Significa cerrar el círculo, empecé aquí mis primeros años de profesional y volver es muy bonito. No sé los años que me quedan, ojalá muchos… Con 34 años vas viendo que se puede acabar pronto el baloncesto. Buscaba reencontrarme con gente del pasado, volver a jugar delante de mi familia y demostrar que puedo jugar en el equipo de mi tierra en ACB.

-Porfirio Fisac ha afirmado que es una de las piezas fundamentales de la columna vertebral del equipo, ¿cree que tiene ese papel relevante?

-La experiencia de haber vivido muchas cosas me da ese papel. La confección del equipo está hecha con mucha gente joven que necesita en según qué momentos la ayuda de veteranos que les marquen el camino o la exigencia. Que vean en momentos de tensión cómo hacer las cosas y tengan alguien en quien poder fijarse. Es quizás por lo que Porfi confía en nosotros para ese papel.

-¿Cómo le sentó ese triple ganador ante el Betis?

-Una explosión de alegría porque el partido se nos había complicado muchísimo. Pelear, remontar y acabar ganando es algo que sueñas poder hacerlo. He hecho pocos en mi carrera… Algo que podré recordar.

-¿Está cómodo con su rol de veterano en el puesto de base?

-Sí, desde el primer día nos entendimos muy bien con Carlos y Javi. No me gusta ser el veterano pesado que siempre está encima, insistiendo en lo que tienen que hacer. Evidentemente si les tengo que ayudar en algo, lo voy a hacer, no solo con palabras sino con hechos. Ellos son dos chicos muy maduros pero a la vez tienen esa alegría de la juventud. Continuarán trabajando y desarrollándose, si puedo echarles una mano, para mí será un orgullo.

-La llegada de Ennis, ¿qué puede aportarle al equipo?

-Ennis nos amplía la rotación, nos da poderío físico, a campo abierto muchos puntos… Es un jugador de garantías que se adapta perfectamente a nuestro estilo de juego. Nos gustaría a todos que Seibutis estuviese aquí con nosotros pero no sabemos cuándo va a poder entrar en dinámica y ayudarnos.

-¿Esperaban este gran inicio dentro del vestuario?

-Las sensaciones durante la pretemporada fueron muy buenas pese a no estar todos. Los que llegamos de fuera nos integramos muy rápido pero esa química luego hay que plasmarla en la canacha. Esa mezcla entre veteranía y juventud creo que empastó muy bien y este es el resultado. Habrá momentos en los que no funcione todo bien y esa buena química nos ayudará.

-Dos asignaturas pendientes del equipo son el tiro exterior y la intensidad defensiva fuera.

-Esa juventud que nos da descaro y valentía nos quita algo de madurez. A veces somos un poco diente de sierra, tenemos que ser más constantes y no tener estos altibajos. Lo que a priori debe ser nuestro punto fuerte nos está costando.

-¿Está preparado el grupo para la Copa y la Champions?

-Si miras la clasificación, estamos ahí, siendo ambiciosos debe ser una meta planteable. Pero hay seguir ganando, no vale quedarse con el inicio y pensar que ya está hecho. La Champions debe ser también un objetivo, no hemos terminado de jugar bien fuera pero ahora jugamos tres partidos en casa y el Príncipe Felipe se tiene que notar.

-El siguiente encuentro es contra el Real Madrid, ¿se puede soñar con una victoria?

- Por supuesto, a un partido todo puede pasar, hay que tener esa mentalidad ganadora. El día del Barça fue un espectáculo. En estos partidos tienes un punto menos de presión porque los favoritos son ellos. Ojalá nos sirva para estar tranquilos, soltarnos y disfrutar del ambiente.

-Echando la vista atrás, ¿cómo valora su evolución y experiencia como jugador?

-Estoy muy orgulloso de mi trayectoria. Son 17 años, la mitad de mi vida jugando como profesional. He estado en muchos sitios y creo que guardan un buen recuerdo de mí. Con eso te quedas, con la gente que has conocido, los jugadores con los que has compartido vestuario y ojalá pueda mantener amistad con muchos de ellos.

-Recientemente ha sido padre, ¿sus prioridades han cambiado?, ¿cómo se imagina su vida fuera del baloncesto?

- Creo y espero que esté ligada al baloncesto. Estoy a punto de terminar un máster de dirección deportiva. Antes hacía vida con mi mujer, ahora es toda para nuestro hijo.