Andreu Casadevall explicó ayer que su equipo ha recuperado «un poco» la alegría tras la última victoria, que se había entrenado bien esta semana y que, pese al desgaste, estaba contento porque había visto «sonreír a la gente y complicidad». Lo necesitarán mañana ante el Valencia, un equipo ante el que no se puede bajar la guardia. «Tensión hay que tener siempre, y más ante un equipo que vive un gran momento como el de Valencia. Hay que ir con el cuchillo entre los dientes y trabajar con paciencia y sin imprecisiones porque penalizan».

El técnico destacó que el baloncesto «es un trabajo de esfuerzo y sacrificio» y que cuando los jugadores «presionan líneas de pase y están a un nivel de concentración alto, tienen que salir las cosas porque el juego también es más fluido», dijo Casadevall, que sigue sin contar con un nuevo pívot. «Con los pocos mimbres que tenemos ahora mismo, no podemos permitirnos que los jugadores importantes no aporten».

Respecto al rival, el entrenador del Tecnyconta puso en valor sus características. «Es un conjunto que minimiza sus errores, juega con muchos espacios y sabe buscar las ventajas. Juega con doce jugadores y con un punto de exigencia en el que, quien no está bien dos minutos, no juega».

Igualmente, el preparador del conjunto rojillo explicó que es un grupo «con una exigencia máxima y con buena lectura de juego», que permite que muchos jugadores anoten cerca de los diez puntos y sean «francamente peligrosos. No se puede bajar la guardia porque te puede hacer mucho daño».

Por su parte, Pedro Martínez, técnico del Valencia, no quiere confianzas ante el Tecnyconta. «No podemos pensar que porque nos hemos clasificado para el Top16, el Zaragoza va a venir pensando que no nos puede ganar. Al revés, van a pensar que es un momento idóneo para hacerlo. Es un equipo que realiza un muy buen baloncesto y que tiene jugadores muy polivalentes, pívots que juegan muy bien lejos del aro». Algunos de ellos los conoce bien Martínez «porque los he entrenado», como es el caso de Bellas o Fotu, «que son muy buenos y tienen una mentalidad competitiva». El técnico advirtió a su equipo «para que no nos cojan con el paso cambiado».