Agentes de la Policía Nacional han cerrado el caso del robo en el estadio El Alcoraz con dos nuevas detenciones, que se suman al arresto de una pareja el día 20 de julio cuando se disponía a perpetrar un robo en las instalaciones deportivas de la SD Huesca. Estos integrantes son también veteranos en los grupos organizados dedicados a los robos profesionales y con botines suculentos.

El robo en El Alcoraz, por valor de casi 70.000 euros, fue perpetrado por profesionales del robo con fuerza, habituales del crimen organizado. Son especialistas en este ámbito delictivo, con habilidades en anulación de alarmas, destreza para la apertura de cerraduras, forzamiento de cajas fuertes y conocimiento de los métodos de investigación policial. Tienen un amplio historial delictivo, sumando un total de 59 detenciones policiales, en su mayoría por robos con las mismas características: detallada planificación, utilización de medios sofisticados y botín suculento. También cuentan con delitos violentos en su trayectoria, con arrestos por detención ilegal, extorsión o robos con violencia.

El robo se perpetró con un claro reparto de las tareas entre todos los componentes del grupo, lo que les permitió finalizar su asalto en menos de dos horas. Los investigadores atribuyen al componente femenino las funciones de vigilancia. En el interior, mientras dos de los integrantes se encargaban de cometidos que exigían de mayor fortaleza, el último componente realizaba una requisa de las estancias en busca de depósitos de dinero.

Durante la investigación, el 20 de julio los agentes observaron un desplazamiento de dos de los componentes del grupo, quienes de madrugada abandonan Madrid y se dirigían nuevamente a la ciudad de Huesca, detectando los investigadores para su sorpresa que volvían a inspeccionar, en la oscuridad, los accesos a las oficinas del estadio El Alcoraz.

Una vez revisado su objetivo regresaron a su vehículo, en cuyo maletero transportaban todos los útiles necesarios: inhibidor de frecuencia para anular las alarmas, tijeras para cortar cables, herramienta de oxicorte para fundir cajas fuertes, maza, pico, pata de cabra, guantes, taladro, amoladora, llaves de bumping, extractor de bombillos y ganzúas.

Los investigadores procedieron a su detención, frustrando de esta manera un nuevo robo en el estadio de fútbol, e intervinieron las herramientas referidas.

Tras las detenciones, los agentes practicaron dos registros en los domicilios de los detenidos, ubicados en las localidades madrileñas de San Martin de la Vega y Ciempozuelos. Allí se incautó más herramienta específica para la comisión de robos, así como efectos y documentación.

Las gestiones realizadas permitieron a los investigadores concluir que el robo fue cometido por cuatro partícipes y que los mismos habían celebrado al día siguiente el éxito de su cometido con una cena en un restaurante de alto standing de Madrid.

Tras las dos primeras detenciones, los agentes averiguaron la identidad de los otros dos integrantes, resultando tratarse también de delincuentes habituales del crimen organizado dedicados a la comisión de robos especializados, con una amplia trayectoria criminal en este campo.

J.L.D.G., de 32 años, colaboraba habitualmente con un famoso alunicero conocido como Niño Saez, con diecisiete detenciones por su participación en robos tanto en la zona de Madrid, como en Andalucía. Durante el robo en El Alcoraz fue uno de los dos encargados de realizar aquellas tareas que requerían fuerza física. Tiene gran habilidad para el uso de la maza.

L.A.C.M., de 26 años, con veintinueve detenciones por robos, fue en el asalto al estadio del Huesca el buscador, encargado de inspeccionar todas las oficinas en busca del dinero.