La selección española encara en Skopje su último examen de la temporada, con el objetivo de mantener su solidez como líder, antes de iniciar el curso el 2 de septiembre con una final ante Italia, en el partido que decidirá la selección del Grupo G que se clasifica directamente para el Mundial de Rusia. El sufrimiento de Italia en Skopje es la referencia con la que el seleccionador, Julen Lopetegui, ha preparado a sus jugadores para el duelo ante Macedonia (20.45). A falta de pocos minutos para el final de aquel encuentro, la azzurra perdía 2-1 y solo una remontada en los últimos compases, con tanto de Inmobile, evitó su tropiezo.

La sensación de que el espacio selección se ha vuelto a perder es clara. Lo conseguido con la conquista de dos Eurocopas y un Mundial se ha ido evaporando hasta llegar a un presente, en el que sienten que solo los clubes captan la atención y en la Roja no se habla de fútbol. Polémicas con declaraciones entre clubs, silbidos a Gerard Piqué, futuro de jugadores... se habla de todo menos de un partido clave. Parecía que nada le afectaba a Piqué pero regresó el rechazo de aficionados españoles expresado en silbidos en Murcia. Un nuevo capítulo del que acabó hastiado. Es la segunda ocasión en la que llega a Skopje en la misma situación. En septiembre del 2015 fue tras León, donde comenzó todo, y Oviedo.

Lopetegui recupera a David De Gea para la portería, superados sus problemas estomacales, y a los madridistas Carvajal y Sergio Ramos para la zaga, con permiso para ausentarse frente a Colombia. El tercero es Isco, que pelea por un puesto con Thiago y se decidirá en función de las sensaciones físicas de este último.

Con Andrés Iniesta con puesto fijo con Lopetegui, Isco o Thiago es la única duda por despejar de un once con tridente ofensivo formado por Vitolo, un jugador en estado de gracia con la selección como David Silva, y en punta Diego Costa.

PELIGRO AMARILLO / Tras las vacaciones el próximo duelo oficial de la selección española será el que decidirá el liderato, frente a Italia en el Santiago Bernabéu. En Macedonia hay seis jugadores con el riesgo de sanción si reciben una cartulina amarilla. Son Piqué, Sergio Ramos, Busquets, Thiago, Vitolo y Diego Costa.