Lalo Arantegui se ha presentado esta mañana para hacer un pequeño balance de la temporada recién finalizada y para explicar cómo quedará configurada más o menos la plantilla de cara al próximo curso, pendiente aún de renovaciones, salidas y fichajes. El director deportivo ha utilizado la palabra "decepción" para resumir el ejercicio. "La temporada dista mucho de nuestro objetivo, que era el ascenso", ha reconocido sin profundizar en responsabilidades y centrarse en una exposición breve de, según su criterio, las causas que han conducido a lastimosa campaña. "De todos es sabido que afectó el cambio de líder del equipo, del entrenador. Por supuesto, la sucesión de lesiones ha sido un actor diferencial, y en el cambio de técnicos, salvo con Víctor Fernández, no se han logrado números para luchar por el ascenso. La plantilla, en la que confiábamos por su buen rendimiento anterior, era joven... Yo era el primero que pensaba que se podía igualar o mejorar la clasificación de la 2017-2018, pero no ha sido posible".

Arantegui ha recalcado la responsabilidad que le corresponde en el fracaso, aunque ha subrayado que "no todo no ha sido negativo, como por ejemplo la aparición de nuevos jugadores con mucha proyección". A la pregunta de si en algún momento ha visto peligrar su puesto, ha apuntado: "Me he sentido respaldado y querido siempre. Ahora hay estabilidad y la toma de decisiones no es impulsiva. Trabajamos con conocimiento, corazón y a largo plazo".

Como hace siempre, Lalo ha enviado un mensaje rotundo sobre qué pilares se sostendrá el nuevo proyecto, y, una vez más, ha comentado que uno de ellos no será el del pulso financiero "porque estamos en inferioridad económica con otros clubes. Sé que soy muy reiterativo con esto, pero es bueno no olvidarlo". Si hasta ahora era el máximo responsable en la toma de decisiones en su parcela, con Víctor Fernández se ha abierto otro escenario, de colaboración directa. "Vamos de la mano del míster para crear un grupo ganador. En todas partes cuerpo técnico y dirección deportiva consensuan la formación de una plantilla". Arantegui incide en el mensaje de Fernández sobre la conciliación laboral. "Como pidió el míster, es necesaria la unión entre todos los estamentos. En el Real Zaragoza todos somos uno. Así pelearemos por regresar a Primera".

Futbolistas en el mercado

Una vez dado carpetazo sin excesivo ruido a ese pretérito terrible, el director deportivo ha sacado la lista de la compra, de la venta y de las renovaciones. Ya están en el carrito Biko, Etinof y Mingotes (este saldrá cedido con opción a renovación). Vázquez y Gual vuelven a sus orígenes (Espanyol y Sevilla) y Dorado termina contrato ("le agradecemos su profesionalidad"). Mintras, se ha producido el adiós de Toquero. "Aguirre ha sido traspasado, Perone se queda en el Extremadura, Alfaro continúa en el Hércules y con Raí intentaremos buscar una cesión. Con Álex Muñoz igual que con Raí, cesión o traspaso. El resto continúan". Lo más importante: Benito, Pombo y Verdasca están en el escaparate. "Hemos hablado con los futbolistas y con su entorno y hay consenso para buscar una salida para los tres", explica Arantegui. El caso de Pombo, un canterano con talento que no ha respondido este año a las expectativas, tiene miga. "Es un futbolista muy querido por todos, que termina contrato en 2020. Tendrá un mercado a nivel individual. No vamos a echar a nadie pero escucharemos ofertas".

La sobresaliente irrupción de Pep Biel, quien ya ha captado la atención de algunos equipos, ocupa al director deportivo, que se siente tranquilo con el futuro de otros destacados como James Igbekeme y Carlos Nieto porque tienen contrato en vigor y porque "han demostrado su predisposición a seguir con nosotros. Con Biel, el Real Zaragoza va a trabajar para mantenerlo". Papunashvili no se toca: "El club no se va a sentar a escuchar ofertas. Lo malvenderíamos porque ha pasado un año muy malo con las lesiones", dice Lalo. Y la espinosa renovación del Delmás continúa. "Le quedan dos años más de contrato. Estamos contentos con él. Seguimos en conversaciones, pero no nos planteamos su salida. Ros y Eguaras, con una temporada más, tendrán que esperar para ver cómo se desarrolla el próximo ejercicio.

De los fichajes de enjundia, Arantegui no se ha extendido demasiado. Serán "5, 6 o 7 además de los que han llegado". "Tenemos nombres muy consensuados pero los tiempos no dependen de nosotros. Trabajaremos para que Víctor disponga de los jugadores cuanto antes". Entiende que acertar en los delanteros es muy importante pero no tan trascendental. "No aspiramos a buscar atacantes de 25 goles. Queremos gente físicamente en plenitud de facultades, que conozca la categoría y el fútbol español". La pretemporada comenzará el 11 de julio (Boltaña del 16 julio al 2 de agosto), y los partidos previstos son el de las Peñas en Barbastro (día 19), en Tarragona, en Miranda de Ebro y contra el Alavés en el Trofeo Carlos Lapetra, con fecha aún pendiente.