Quedan tres semanas para que se dispute el Campeonato de España absoluto en La Nucía. Y se espera que gran parte de los atletas aragoneses renuncien a la cita más importante del calendario estival. La deserción se espera que sea muy grande y un 60% prefiera descansar o coger las vacaciones antes que alargar la temporada y competir en unas fechas tan inadecuadas.

Hasta el momento 31 atletas han realizado la mínima de asistencia. Es segura la participación en el Nacional absoluto de Bianca Acosta en el hectómetro, Dani Ambrós y Nieves Mayo en el 200, aunque esta quiere realizar la mínima en los 400, mientras que en el 800 corre él serrablés Jorge David Torre y en el 1.500 Noé Larroy e Iván Manceñido. En el 5.000 Aragón cuenta con dos magníficas bazas como son Toni Abadía y Carlos Mayo.

Laura Mireya Martín disputa los 100 vallas, mientras que en las vallas bajas opta a ser campeona de España la juvenil Salma Paralluelo y quieren ser finalistas Alicia Leyva y Elisa Cortés. El único atleta que compite de la cantera del Monzón es Ignacio Vigo y el único lanzador del lote es Héctor Aragüés.

La mayor parte de atletas que renuncia a la competición pertenecen a categorías menores. Son los casos de Laura Pintiel, Elena Daniel y Elena Guiu en 100, Inés Arqued en 800, Pol Oriach y Mireia Arnedillo en 1.500, Patricia González en 400 vallas o Daniel Jimeno en marcha. Otros están saliendo de lesiones como la campeona de España de 3.000 indoor Cristina Espejo, Isabel Macías, recientemente operada en una de sus piernas, el lanzador de jabalina Ignacio Franco, con el hombro tocado o César Larrosa, con problemas en su tendón de Aquiles.

Dos clásicas del Nacional renuncian a la cita. Son la lanzadora de peso Patricia Heredia y la pertiguista Alicia Raso. Tampoco acudirán el decatleta Jaime Cardiel, la mediofondista Erika Torner y la fondista promesa Nerea Izcue.