Rafael Nadal, número uno del mundo, ha logrado su primer título de la temporada y el número 61 de su carrera, tras imponerse en la final del torneo de Doha al francés Gael Monfils por 6-1, 6-7 (5-7) y 6-2 en dos horas de juego. Una victoria con cierto sabor a revancha para el tenista español, que había cosechado sus dos únicas derrotas ante Monfils en el torneo de Doha, donde Nadal cayó ante el galo en las semifinales del año 2012 y en los cuartos de final del 2009.

Derrotas que parecieron motivar este sábado especialmente al jugador español, que ha arrancado el encuentro con dos roturas se servicio consecutivas, que han permitido a Nadal ponerse en un visto y no visto con un contundente 4-0 en el marcador. Una ventaja que el número uno del tenis mundial no ha desaprovechado, para alzarse con la primera manga por un claro 6-1 en tan sólo 23 minutos.

REACCIÓN DEL FRANCÉS

Pero ni el contundente marcador ni la superioridad de Nadal en el juego han desalentado a Monfils, número 31 de la clasificación mundial, que se ha aferrado al partido tras romper por primera vez el servicio del español (0-2) en el segundo juego de la segunda manga. Sin embargo, para derrotar a Nadal es necesario mucho más que una simple mejoría, como no ha tardado en comprobar el francés, que ha acusado la presión psicológica a la que español somete a sus rivales cuando marcha por detrás en el marcador.

En el quinto juego, Monfils ha logrado salvar las dos bolas de rortura de las que gozó el español, pero en el séptimo el jugador francés no ha podido evitar que Nadal recuperase el servicio perdido, y acabase forzando la disputa del juego decisivo. En el desempate, Monfils ha estado más certero y se ha impuesto por un ajustado 7-5, tras aprovechar el francés, que disputaba su tercera final en Doha, el único fallo con su servicio del tenista español en la 'muerte súbita'.

BUENAS SENSACIONES

Efectividad que el jugador francés no ha podido mantener en el tercer y definitivo set, en el que Monfils ha desaprovechado en el quinto juego hasta cuatro bolas de rotura para igualar el 'break' de ventaja (3-1) con el que marchaba Rafael Nadal en el tanteador. Los fallos han acabado por condenar a la derrota al francés, que se ha quedado por tercera vez a las puertas del triunfo en Doha, donde Nadal se ha coronado por primera vez en su egunda final. En el 2010 perdió con el ruso Nikolay Dadydenko.

Este triunfo permite a Nadal, que ha contado con el apoyo desde la grada del exjugador del Real Madrid Raúl González, sumar su torneo 61º en su carrera y, lo más importante, adquirir las mejores sensaciones posibles para el Abierto de Australia, que arrancará el próximo día 13 en Melbourne.