Teruel vive con intensidad el fútbol, el voleibol y el baloncesto. Pero el atletismo tiene una gran tradición, sobre todo en las categorías de formación. Los dos grandes emblemas son La Salle Teruel y la Asociación Atlética Turolense. El primero siempre se ha centrado en el campo a través y ha logrado grandes éxitos en el Nacional por equipos y en él se formaron figuras como Marta y Elena Silvestre y Jaime Escriche.

Sin embargo, la Asociación Atlética Turolense tiene otro enfoque y siempre se ha centrado más en el tartán, en las pruebas de velocidad, de saltos y de lanzamientos, sin olvidar el mediofondo. Esta entidad presidida en la actualidad por César Torrente tiene mucha historia. Nació en el año 1995. «En aquellos años todo dependía de los colegios. Pero cuando pasaban al instituto siendo cadetes se producía un vacío. Fue entonces cuando se impulsó la creación del club por parte de los padres de los atletas», indica.

Ahora continúa la misma estructura directiva que hace 28 años. «Todo sigue promovido por los padres de los atletas, que tienen a chavales desde los benjamines a los infantiles. La junta directiva cuenta con diez padres. La vicepresidenta es Mari Carmen Pérez y el tesorero, Jesús Martín. El presidente es el que hace todo y, si este se aparta, se agota el club». Torrente tiene un hijo en infantil en atletismo. «Se llama Adrián. Hace pértiga y hacemos locuras para desplazarnos a Zaragoza».

Torrente explica que en Teruel el fútbol «se lo come todo. Lo practican todos los niños y el segundo plato son el voleibol y el atletismo. En chicas pocas hacen dos deportes y eligen entre el baloncesto, la gimnasia rítmica y el atletismo». Nunca se han planteado unir fuerzas La Salle y la AA Turolense para hacer un potente equipo. «La Salle está especializada en cross y tiene pocas presencias en pista. A los dos nos cuesta sacar equipos, aunque tendríamos algo decente. Pero es complicado. Nosotros somos filiales del colegio de Las Viñas y competimos a nivel provincial con la AA Turolense y Las Viñas».

Para los amantes del deporte en Teruel roza lo surrealista que una ciudad de 35.000 habitantes no tenga una pista de atletismo homologada. «Esto es tercermundista. Ya son viejas y tienen 30 años. Por dejadez de unos y otros no se realiza un mantenimiento adecuado. Hay un proyecto en el que las obras comenzarán el año que viene, pero es posible que hasta el 2020 no veamos las pistas terminadas. Es un hándicap importante puesto que hay que realizar muchos kilómetros para que los atletas puedan tener marcas homologadas. Hay que viajar hasta Zaragoza y Alcañiz y aquí las pistas no están homologadas para los lanzamientos», apunta.

Teruel es un lugar ideal para tener un Centro de Alto Rendimiento. Pero es una ocasión perdida. «En Soria hay un centro de estas características. Podríamos tener unas instalaciones para entrenar a altitud. Pero falta un poco más de implicación por parte de todos, de las instituciones, de los clubs y de la sociedad. Nos hace falta ser un poco más ambiciosos. Con el tiempo podríamos tener tranquilamente un equipo en Primera», asegura.

Otro gran hándicap es que los chavales se tienen que ir a estudiar fuera de Teruel. «Desde los 18 se van fuera a estudiar y no regresan hasta los 25 años. Somos filiales del Scorpio y así tienen una salida natural. Pero en la AA Turolense tenemos un vacío en el que no podemos sacar un equipo en juveniles. Cuando son cadetes hay tanta exigencia en el fútbol que los chavales tienen que elegir deporte. En cadete nos cuesta Dios y ayuda sacar un equipo. En chicos en pista cubierta lo conseguimos, pero al aire libre no llegamos», dice.

Este año ha sido importante puesto que ha llegado como director deportivo Carlos García. «Es profesor de Educación Física y lo han destinado a Teruel. Esto para nosotros ha sido un bendición de Dios. Tiene una facilidad innata para tratar a los niños. Se encarga de formar a los chicos y a los entrenadores». García cuenta con la ayuda como técnicos de Marta Cortés y Ángel Alcáraz. Con García se ha producido un cambio en la estructura de los entrenamientos. «Hay que dignificar la labor de los entrenadores y que tengan un salario acorde con lo que trabajan. Ha habido un cambio de horarios y se han perdido niños. Tenemos 98, pero los que hay vienen contentos. Antes teníamos muchos en la escuela, pero no iban a competir. Ahora tenemos seis niños que pueden ir a los Campeonatos de España infantiles y en cadete, dos», sentencia Torrente.

La filosofía de la AA Turolense es «en un 60% de formación y en un 40% de competición. Hay que hacer bien la base formativa para que los niños te pidan competir porque pueden hacer un papel digno». En octubre se organiza el Día del Atletismo en Pista. «Vienen unos 300 niños». También se hace en abril El cole que más corre. «El 9 y 10 de junio se organiza el Memorial Navarro Bau en las pistas. Vienen 150 atletas desde infantiles, pero baja el nivel al no valer las marcas», concluye.