Un gol de penalti de Jorge López (m. 8), que transformó un penalti inexistente sobre Aimar, le bastó ayer al Valencia para llevarse los tres puntos en su visita al Albacete. El equipo de Benítez, que acumula cinco triunfos y ocho jornadas sin perder, se proclamó campeón de invierno.

El partido se decidió pronto. El colegiado Moreno Delgado pitó penalti por un leve empujón de Peña a Aimar fuera del área. López marcó tras tocar el balón ligeramente Almunia y, a partir de entonces, el Valencia jugó como mejor sabe: controlando el balón y defendiendo con una fortaleza extraordinaria. Unai (m. 30) y Fabiano (m. 79) tuvieron las mejores ocasiones para empatar, pero el Albacete echó de menos al goleador Aranda, sancionado.